Se mantienen interrupciones eléctricas en zonas rurales de Trinidad

El tendido eléctrico en Trinidad ha sufrido algunos daños por las intensas lluvias de la Tormenta Subtropical Alberto. Foto: Felicia Borrell.

Por: Juan Carlos Naranjo.

Varias comunidades rurales del municipio de Trinidad, en la provincia de Sancti Spíritus, al centro sur de Cuba, permanecen sin servicio eléctrico desde este lunes 28 de mayo, por averías en la línea de 33 Kv que alimenta a toda la zona comprendida desde La Papelera hasta los límites con la cabecera provincial.

La Organización Básica Eléctrica (OBE) en Trinidad, informó que los poblados de El Crucero Bandomo, FNTA, La Paloma, Caracusey, San Pedro, las comunidades 21, 22 y 23 de Pitajones, el propio poblado de Pitajones, así como La Pedrera y La Ermita son las zonas más afectadas.

Según la OBE, sobre el terreno se evalúa, en dependencia de las condiciones del tiempo, las posibilidades de acometer los trabajos para el restablecimiento de la electricidad, aunque haya áreas a las cuales no se había podido llegar hasta el mediodía de hoy martes, y existen reportes de postes caídos y tendidos eléctricos en el suelo.

No obstante, se señaló que los trabajadores de la OBE en Trinidad disponen de los recursos y medios de transporte necesarios para iniciar el restablecimiento de los circuitos dañados, siempre que las lluvias lo permitan.

Topes de Collantes, en las montañas trinitarias, se añadió, no reportaba, hasta igual hora y fecha, grandes daños en la infraestructura eléctrica, pues hace aproximadamente un año, se trabajó duro en la restauración de la línea principal que conduce a ese enclave, aunque se precisó que desde Topes se han recibido seis quejas provenientes de viviendas aisladas.

Se insistió que los clientes residenciales y estatales, ante averías en su entorno, deben comunicarlo a través del teléfono 18888 en el puesto de mando de la Empresa Eléctrica provincial de Sancti Spíritus.

Asimismo se ha hecho un llamado a la población para que se mantenga alejada de los cables eléctricos en el suelo y no tocarlos aunque no haya servicio eléctrico en sus viviendas o centros laborales, a fin de evitar accidentes.