Chiqui Gómez Lubián y Julito Pino Machado en el recuerdo patrio

Chiqui Gómez Lubián (izq.) y Julio Pino Machado.

Por: José Rafael Gómez Reguera

Mis primeros acercamientos a la figura de Agustín “Chiqui” Gómez Lubián fueron a través de su literatura. Luego vino la etapa de saber mucho más sobre ese heroico joven villaclareño, fallecido, junto a Julio Pino Machado, el 26 de mayo de 1957 en un trágico accidente, luego de dedicar su juventud a la lucha contra el batistato.

En el automóvil que utilizaban para realizar acciones revolucionarias, explotó el artefacto que les ocasionó la muerte.

De “Chiqui”, quien diera su vida cuando ni siquiera había cumplido 20 años de edad (faltaba casi un mes exacto),  es hermoso su poema La dama blanca, donde escribe: La dama blanca besó mi frente / Con beso casto, beso de hermano. / Besa la frente la dama blanca / a los que deben morir temprano. / Extraña ansia siento en mi pecho, / mi mente intenta buscar en vano, / siento en mi pecho la extraña ansia / de los que deben morir temprano.

Algunos han dicho que este poema fue una premonición. Bellos versos que expresan su disposición a entregar la vida, si fuera necesario, por la Patria y por la Revolución, y no refleja un pensamiento pesimista o fatalista.

De Julito Pino Machado, de 22 años, fundador del Movimiento 26 de julio en Las Villas, se dice que era un joven más bien serio, estudioso, con un alto sentido de responsabilidad, profundamente convencido de la necesidad de la lucha revolucionaria, valiente y, al mismo tiempo, cariñoso y de grandes sentimientos humanos. (Con datos de Café Mezclado y Ecured)