Trinidad de Cuba: un nuevo caso reportado de la COVID-19

Foto: José Rafael Gómez Reguera.

Por: José Rafael Gómez Reguera

El municipio de Trinidad, al centro sur de Cuba, en la provincia de Sancti Spíritus, reportó un nuevo caso confirmado del coronavirus causante de la COVID-19, con lo cual el mes de octubre deviene el mes en que más personas infectadas del SARS-CoV-2 han sido detectadas en el territorio. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV) (V) (VI) (VII) (VIII) (IX) (X) (XI)

De acuerdo con el parte oficial del Ministerio de Salud Pública de la Isla, al cierre de las 12 de la noche de este lunes 19 de octubre de 2020, la provincia de Sancti Spíritus confirmó otros 16 casos de la COVID-19, uno de los cuales es de Trinidad.

Se trata de un ciudadano cubano de 78 años de edad, del cual se investigaba todavía la fuente de infección, y se mantenían en vigilancia 17 contactos.

Los otros casos confirmados e informados esta mañana corresponden a los municipios de Sancti Spíritus (10) y Cabaiguán (5).

La presencia del SARS-CoV-2 ha trastocado la vida de Trinidad, una ciudad turística por excelencia, y donde en el pasado mes de marzo fueran detectados los primeros casos de la COVID-19 en Cuba, tres turistas alojados en un hostal de la Tercera Villa de Cuba, declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad, y uno de los destinos de mayor demanda tanto por parte de visitantes foráneos como cubanos.

Las autoridades han hecho constantes llamados para, una vez superada la etapa inicial de la pandemia, mantener las medidas higiénico-sanitarias y poco a poco se consiguió ir restableciendo la vida citadina, incluso, con la apertura de algunos negocios privados.

No obstante, la presencia de turistas nacionales provenientes de la provincia de Ciego de Ávila contagiados con el coronavirus, obligó a decretar una cuarentena para turistas alojados en el hotel Village Costasur, y el cese de toda actividad en ese centro, donde más de un centenar de personas tuvieron que permanecer aisladas, tanto clientes como trabajadores del centro.

El otro problema al que se enfrentó Trinidad fue el contagio de choferes de la Agencia Taxis Cuba que prestaban servicio en la ciudad cabecera provincial, lo que provoco no pocos contagios entre sus familiares y personas allegadas en esta Villa, un caso que sigue aportando positivos y que ha complicado la situación epidemiológica del municipio.

El Consejo de Defensa Municipal ha dado seguimiento a toda esta problemática y orientado el reforzamiento de las medidas de protección en centros laborales, así como en todo el municipio, en general. Entre ellas, la obligatoriedad de usar nasobucos siempre que se esté fuera del hogar, la desinfección de espacios públicos y de pasamanos de escaleras, llavines, y el mantenimiento de soluciones cloradas para la desinfección de las manos en todos los establecimientos.

De igual manera, se ha orientado el cese de no pocas actividades de oficina y vinculadas a la Oficina Nacional de la Administración Tributaria, el estricto control de todos los vehículos que entran y salen de Trinidad, el chequeo de la temperatura corporal, y la desinfección del calzado en todas partes, mediante soluciones cloradas para los llamados “pasos podálicos”. Sin nasobuco, además, no se puede acceder a ningún establecimiento.

A pesar de las medidas asumidas, no siempre la ciudadanía ha respondido con responsabilidad y disciplina, y se han sucedido colas donde se expenden productos de primera necesidad en las que el aglomeramiento ha sido notorio y, en consecuencia, no se observa el distanciamiento físico imprescindible para evitar contagios.

No obstante, el autocuidado debe ser lo que predomine en cada lugar, porque de la estricta observancia de las medidas implementadas para espacios públicos y al interior de los establecimientos estatales, dependerá que no se produzcan nuevos contagios y el rebrote consiga controlarse en Trinidad.

El Consejo de Defensa Municipal ha hecho un nuevo llamado para ser disciplinados y enfrentar esta difícil etapa con la colaboración de todos. La única vacuna disponible, ahora mismo, es precisamente esa disciplina, ese control personal y familiar sobre la higiene de las manos, la desinfección del calzado, y el uso del nasobuco dondequiera que vayamos.

Durante esta etapa de rebrote, ha habido necesidad de incrementar los lugares destinados a alojar a los casos contactos de casos confirmados o personas sospechosas, en tanto diversos puntos tanto de la ciudad como de la periferia vivieron días de restricción de movimiento. Ya algunos de estos últimos ven levantadas las barreras y sus pobladores reconocen el desvelo de las autoridades para proteger la salud de todos.

No menos significativo ha sido, y lo sigue siendo, el aporte de trabajadores de la Industria Alimentaria, con la distribución de las cuotas de pan normado a las zonas de restricción, incluso utilizando sencillos medios de transporte, y siempre observando las medidas higiénico-sanitarias previstas en los protocolos de Salud Pública.

Si queremos regresar en etapas anteriores, y adentrarnos en la llamada “Nueva Normalidad”, como ya sucede en otros territorios, se imponen el accionar ciudadano responsable y consciente, sin que otros deban imponer cómo actuar.

Tampoco las administraciones pueden sustraerse a sus obligaciones organizativas en estos casos, así como a exigir el uso obligatorio del nasobuco tanto por parte de sus empleados como de quienes accedan a los establecimientos.

De igual manera, han de mantenerse las medidas restrictivas en barrios y comunidades donde se han detectado casos positivos de la COVID-19, el apoyo de entidades como la industria alimentaria (conocida como Pan y Dulces), así como de Comercio y Gastronomía, y de los establecimientos de las Tiendas TRD Caribe, del CIMEX y de Caracol que asumen la venta de artículos de primera necesidad.

Ciudad turística por excelencia, Trinidad añora reiniciar operaciones no solo en sus hoteles de ciudad y playa, sino también en sus centenares de hostales, así como en otros negocios privados asociados a la gastronomía o a la artesanía, por solo citar dos de los más significativos. Sin embargo, ese ingreso en lo que se ha dado en llamar Nueva Normalidad solo será cierto si nos cuidamos todos y la disciplina impera.