Por: Belkis Niebla López
Conscientes del cuidado que deben tener ante el rebrote de la COVID-19 en Trinidad y respetando las medidas higiénico sanitarias orientadas por el Ministerio de Salud Pública, el colectivo de trabajadores del Taller de Enseres Menores, perteneciente al Grupo de Servicios Técnicos, Personales y del Hogar, continúa su labor en función de ayudar a la familia en la solución de los problemas de los equipos electrodomésticos tan necesarios en cada morada en estos tiempos de pandemia. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV) (V) (VI) (VII) (VIII) (IX) (X) (XI)
Para ello, cada jornada enfrentan las carencias en medio del recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero que imponen los Estados Unidos a Cuba, y hacen un esfuerzo extraordinario si tenemos en cuenta que este año no se han recibido en el taller las piezas líderes para la reparación de los distintos equipos, solo dispusieron de 700 resistencias de hornillas eléctricas que, lógicamente, no satisfacen la demanda de más de 72 mil personas.
Este centro de servicios en el municipio cuenta con un total de 16 mecánicos, incluidos los que laboran en la periferia de la ciudad y en las zonas rurales y del Plan Turquino; protagonistas mediante su experiencia e ingenio creador de que el pueblo en muchos de los casos salga complacido con el arreglo de sus artículos.
Durante este mes de octubre dedicado a homenajear a innovadores y racionalizadores, los que laboran en el Taller de Enseres Menores de Trinidad han dado muestras de que son verdaderos malabaristas del ingenio porque del aparato menos esperado reciclan piezas que con las adaptaciones necesarias devuelven la vitalidad a otros equipos que logran rescatar.