Por: Ana Martha Panadés Rodríguez
Lluvias localmente intensas se produjeron en el municipio de Trinidad durante la noche del lunes y la madrugada del martes con registros que han superado los 200 milímetros de precipitaciones en la ciudad y alrededor de 300 milímetros en el macizo montañoso de Topes de Collantes en 24 horas.Estas precipitaciones originaron las crecidas de los ríos Ay, Caracusey y Agabama con niveles impresionantes de desbordamiento; en el caso del Agabama que también recibió las aguas de presas villaclareñas, llegó hasta la carretera en la zona conocida como la Paloma para interrumpir el paso entre Trinidad y la ciudad de Sancti Spíritus, a partir de las 5 de la madrugada.
Las crecidas por intensas lluvias asociadas a las bandas de nublados que alimentan a la tormenta tropical ETA mantienen bajo agua a asentamientos ubicados en las zonas bajas como el FNTA, Caracusey, Magua, Araca y Cayama, incomunicados hoy por vía terrestre, pero con vitalidad de servicios básicos para la población.
Desde que los pronósticos del Instituto de meteorología confirmaron el deterioro de las condiciones climáticas se implementaron las medidas de la defensa civil encaminadas a la preservación de las vidas humanas y los recursos del estado; por lo que poco más de mil trinitarios de estos asentamientos y el poblado costero de Casilda se encuentran protegidos en casas de familias y vecinos, fundamentalmente.
Las lluvias intensas ocasionaron averías en siete circuitos primariosde zonas rurales, urbanas y montañosas de Trinidad, específicamente en Topes de Collantes se produjo una rotura en una de las líneas de 33 KV que alimenta la subestación de ese poblado. Trabajadores de la empresa eléctrica, con el apoyo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias intentan resarcir los daños en labores complejas por la caída de los árboles y la topografía de esa área.
Desde este lunes también se afectó el abasto de agua a la ciudad cuando dejó de aportar el vital líquido la conductora de San Juan Letrán, lo cual limita el servicio a poco más de 31 mil trinitarios, aunque se mantiene estable el sistema de pozos, beneficiado por la humedad del suelo.
El presidente del Consejo de Defensa municipal, Denis Díaz Peláez, en recorrido por algunas zonas afectadas se refirió también al impacto de la contingencia hidrometeorólogica en la agricultura, con cifras preliminares de más de 100 hectáreas de plátano y otros cultivos dañados como el frijol, el boniato y las hortalizas.