La compañía estadounidense Carnival Cruise Line anunció que en el 2019 ofrecerá 17 nuevas salidas a Cuba a bordo del navío Carnival Sensation, con viajes de cinco días que partirán del sur de la Florida
WASHINGTON.–La cultura autóctona, la seguridad y la belleza natural de Cuba siguen atrayendo a la industria de los cruceros, pese a las medidas de la actual administración estadounidense que refuerzan la aplicación del bloqueo.
La compañía estadounidense Carnival Cruise Line anunció que en el 2019 ofrecerá 17 nuevas salidas a Cuba a bordo del navío Carnival Sensation, con viajes de cinco días que partirán del sur de la Florida.
Según un comunicado de la firma citado por Prensa Latina, los viajes incluirán un día en La Habana, así como paradas en puertos populares del Caribe y Las Bahamas, incluidos Gran Turca, Gran Caimán, Nassau y los destinos privados de Half Moon Cay y Princess Cays.
De acuerdo con las encuestas realizadas a los visitantes, el destino Cuba se encuentra entre los predilectos del Caribe, una región con altos estándares para esta industria en el mundo.
Christine Duffy, presidenta de Carnival Cruise Line, refirió que la Mayor de las Antillas es un destino buscado y están encantados de brindar a sus clientes aún más oportunidades de experimentar y explorar «esa fascinante Isla».
Todos los viajes de cruceros organizados desde los Estados Unidos deben cumplir con estrictas regulaciones del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
La administración republicana que encabeza el presidente Donald Trump anunció en junio pasado un grupo de medidas que dificultan los viajes entre los dos países y refuerzan el cerco económico contra Cuba que se prolonga por más de medio siglo.
Las empresas de cruceros norteamericanas han tenido que adaptar sus itinerarios a las categorías de viajes hacia nuestro país aprobadas por Washington, pues la Mayor de las Antillas se mantiene como el único destino vedado por ley para los turistas norteamericanos.
De la misma manera y utilizando excusas sin ningún basamento científico, el Departamento de Estado emitió una alerta de viaje contra Cuba y ubicó a nuestro país en la escala 3 de 4 niveles con la recomendación de «reconsiderar los viajes».
Las medidas de agresión contrastan con el reconocimiento internacional a la seguridad de Cuba como destino turístico y el nivel de satisfacción y tranquilidad que mostraron más de cuatro millones de visitantes el año pasado.
Pese a las nuevas regulaciones de Washington, Cuba recibió en el 2017 a casi 620 000 estadounidenses, más del doble de los que llegaron el año precedente.
El interés no parece decaer. La información divulgada por Carnival Cruise Line aparece pocos días después de que las compañías norteamericanas Regent Seven Seas Cruises y Norwegian Cruise Line también dieran a conocer un incremento en los viajes a la Isla caribeña.
A pesar de las limitaciones que implica el bloqueo impuesto por Estados Unidos para avanzar en las relaciones bilaterales y especialmente en la actividad marítimo-portuaria y las nuevas medidas anunciadas por la administración del presidente Donald Trump, autoridades cubanas han afirmado que el país prevé implementar un amplio programa de desarrollo de la infraestructura portuaria destinada a potenciar el turismo de cruceros en los distintos puertos del territorio, teniendo en cuenta que cada año la llegada de visitantes a través de esa modalidad tiende a multiplicarse.
*Tomado de Granma