Canciller ruso rinde tributo en Pyongyang a líderes de la RPDC

Por: Benito Joaquín Milanés, Enviado especial

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, rindió hoy homenaje póstumo al presidente eterno de Corea Democrática, Kim Il Sung y al dirigente de este país Kim Jong Il.

El suceso tuvo lugar en la histórica y céntrica colina capitalina de Mansu, luego de un inesperado encuentro con el presidente del Partido del Trabajo de Corea, Kim Jong Un.

En ese sitio depositó un cesto de flores, y ante las estatuas de bronce estuvieron presentes también representantes diplomáticos de Moscú en esta capital, constató Prensa Latina.

En su momento, el titular ruso consideró que la solución al diferendo en la península coreana solo podía lograrse, tras la suspensión de todas las sanciones impuestas a la República Popular Democrática de Corea (RPDC).

Moscú aboga para esta nación por la aplicación de una hoja de ruta que propuso de conjunto con Beijing con vistas a una solución en dos etapas.

En una primera, mediante el diálogo directo entre Washington y Pyongyang, lo cual parece probable tenga lugar en Singapur en la fecha prevista, pese a recientes devaneos del presidente estadounidense, Donald Trump.

Una segunda etapa sería con la participación de las dos Coreas, Estados Unidos, China, Rusia y Japón con la meta de dar solución definitiva del diferendo y firmar la paz en inercia desde 1953.

Lavrov instó recientemente en la capital rusa a no permitir que la cumbre entre Corea Democrática y Estados Unidos sea frustrada.

Aseguró que su país estaba listo para apoyar acuerdos relacionados con Pyongyang que cumplan los intereses de todas las partes involucradas.

En ese sentido subrayó que el Kremlin no se considera facultado para interferir en el proceso de negociaciones entre las partes y dio la bienvenida a los contactos entre los dos países.

Opinó que estaba seguro de los dirigentes de la RPDC eran conocedores de la historia de los últimos años, en alusión directa a lo que las potencias occidentales lideradas por Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte, hicieron contra Bagdad y Trípoli.

(Tomado de Prensa Latina)