El expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) cumple hoy un año de detención preventiva, y su primer día en una cárcel panameña tras su extradición ayer desde Estados Unidos, la primera de un mandatario panameño en la historia.
Por dictamen médico anoche la Corte Suprema de Justicia (CSJ) autorizó el traslado del reo al hospital público Santo Tomás para evaluar su estado de salud, en particular una dolencia cardíaca que su esposa, Marta Linares, y la defensa insistieron que requería atención especializada.
A diferencia de las exigencias de sus familiares, simpatizantes y pronósticos de los abogados, a su llegada ayer el procesado ingresó al centro penitenciario El Renacer, a las afueras de esta capital, y en la tarde asistió a una audiencia en la CSJ donde le informaron que seguiría detenido durante el proceso.
El revés transformó en minutos la postura alegre y triunfal que Martinelli mostró ante los medios desde su salida de la ciudad estadounidense de Miami, donde estuvo en una cárcel federal a partir del 12 de junio de 2018, y pidió un receso, tras el cual sus abogados refirieron una repentina arritmia cardíaca.
Un médico privado contratado por la familia, sin medios técnicos, diagnosticó en la sala la enfermedad ante la CSJ, y a preguntas del magistrado juez de garantías, Jerónimo Mejías, el galeno titubeó y negó la urgencia de la situación, además de confirmar que no atendió al paciente anteriormente.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó ayer lunes de la entrega de Martinelli a las autoridades panameñas.
El expresiente fue acusado en Panamá por monitorear ilegalmente las comunicaciones de más de 150 personas entre 2012 y 2014, mediante multimillonarios sistemas de vigilancia para interceptar y registrar las comunicaciones privadas.
Entre las personas que fueron espiadas por orden de Martinelli figuran aliados y opositores, así como jueces, periodistas, activistas sindicales, diplomáticos estadounidenses y otros.
El expresidente también está acusado de malversar más de 10 millones de dólares en fondos públicos.
(Tomado de Prensa Latina)