Pueblo de Cuba rinde homenaje a los mártires del 13 de Marzo

El homenaje llegó en ofrendas del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, General de Ejército Raúl Castro Ruz; del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; de los Consejos de Estado y de Ministros, y de todos los universitarios cubanos. Foto: Dunia Álvarez Palacios / Granma.

El homenaje en flores llegó en ofrendas del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, General de Ejército Raúl Castro Ruz; del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; de los Consejos de Estado y de Ministros, y de todos los universitarios cubanos

Los nombres de los mártires gloriosos se oyeron, uno por uno, en las gargantas de quienes, hoy, tienen la misma edad de los héroes inmolados.

Trece de marzo, 63 años después, y hubo un silencio largo cuando el homenaje en flores llegó en ofrendas del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, General de Ejército Raúl Castro Ruz; del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; de los Consejos de Estado y de Ministros, y de todos los universitarios cubanos.

La parada solemne, que siempre protagonizan los miembros de la Federación Estudiantil Universitaria (feu), conmemoró este viernes el histórico asalto al Palacio Presidencial y la toma de Radio Reloj, acontecidos en la propia fecha de 1957 por jóvenes del Directorio Revolucionario, al mando del legendario José Antonio Echeverría Bianchi.

En palabras de José Ángel Fernández Castañeda, presidente nacional de la feu, la generación actual ­patentizó, para honrar el ejemplo de los héroes, el compromiso de ser fieles en la defensa de la Revolución y la contribución al desarrollo de la sociedad, y en la evocación del hecho recordó las palabras de Fidel: «Ellos nos legaron el ejemplo con el que nuestro pueblo, día a día, pieza a pieza, e idea tras idea, ha convertido a Cuba de colonia española primero, y humillante dominio imperialista después, en la nación más independiente y libre de la tierra». (Tomado de Granma)