En Trinidad programa de construcción de viviendas avanza pese a la contingencia sanitaria

El programa de la construcción de viviendas se mantiene. Foto: Vicente Brito / Escambray.

Por: Ana Martha Panadés Rodríguez

Iluminada García Ruiz pronto estrenará vivienda nueva en una de las comunidades montañosas del municipio espirituano de Trinidad. Ella, que ha visto levantar cada bloque, agradece con humildad este regalo, tal vez sin comprender en toda su dimensión el impacto del bloqueo de Estados Unidos en la economía cubana y también los efectos de la pandemia provocada por la COVID-19. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV(V) (VI) (VII) (VIII) (IX)

Pero como uno de los programas priorizados de la nación, no se renuncia al cumplimiento del plan para el año 2020 que en este territorio prevé 58 viviendas por las vías estatales y otro tanto mediante el otorgamiento de subsidios a personas con bajos ingresos para las denominadas células básicas habitacionales y otras acciones de rehabilitación.

Grisel Sesmonde Cama, coordinadora de programas y objetivos de la esfera de la construcción en el Consejo de la Administración municipal resalta la disposición de las fuerzas constructoras en aras de acortar los cronogramas de ejecución sin afectar la calidad de los trabajos y concluir la totalidad de los inmuebles que mejoran el fondo habitacional en la ciudad y en las zonas rurales.

Este programa de gran impacto para la población no se detuvo ni siquiera con la emergencia sanitaria provocada por el virus Sars-Cov-2; sin embargo,  Sesmonde Cama reconoció “algunos tropiezos con recursos materiales y las fuerzas constructoras, pero en la última etapa se ha logrado mayor estabilidad, por lo que deben recuperarse los atrasos y cumplir, al cierre de diciembre, los planes previstos para el año 2020″.

Los bajos niveles de acero a causa de la contingencia sanitaria obligó a cambios de proyectos y nuevas soluciones estructurales; la escasez de áridos limitó la disponibilidad de bloques de hormigón, losas, elementos prefabricados y la producción de otros materiales de alcance local; mas, en el Algarrobo,  una comunidad cafetalera y testigo del paso de los rebeldes en la lucha contra bandidos, Iluminada y otras tres familias estrenan nuevo hogar.