Una nueva ronda del diálogo para la normalización de las relaciones entre Serbia y Kosovo se realizará al más alto nivel el domingo en Bruselas, se conoció hoy en Belgrado, de fuentes periodísticas.
Con la mediación de Federica Mogherini, Alta Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad de la Unión Europea (UE), volverán a encontrarse el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, y el mandatario de la administración provisional de Kosovo, Hashim Thaci, informó la agencia de noticias Tanjug.
Basándose en fuentes diplomáticas europeas, añadió que será el primer contacto de las partes a ese nivel después del celebrado el 23 de marzo y que la agenda contará de solo dos puntos, el primero de los cuales consistirá en debatir un acuerdo general sobre la normalización de las relaciones.
El segundo, siempre según Tanjug, será la implementación de los acuerdos ya existentes sobre lo cual Belgrado asegura haber cumplido todos los que le correspondían, mientras Pristina tiene pendiente el de la formación de la Asociación de Comunidades Serbias (ACS).
Antes de este anuncio de hoy, la parte serbia y el propio mandatario habían declarado que no aceptarían discutir nada nuevo hasta tanto las autoridades albanokosovares cumplan con esa única obligación.
Empero, Pristina insiste en condicionar la reunión técnica previa al encuentro de los mandatarios al abordaje de la cuestión energética, un punto que Belgrado considera superado.
La cumbre de Bruselas viene antecedida de varios incidentes, entre ellos la detención del director de la Oficina gubernamental para Kosovo y la sureña región de Metohija, Marko Djuric, cuando participaba a fines de marzo en una conferencia en Kosovska Mitrovica, ciudad de mayoría serbia.
Más recientemente, cobraron fuerza nuevamente las intenciones de los poderes en Pristina de formar el Ejército de Kosovo, lo cual es violatorio de las regulaciones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la administración provisional, y declaraciones sobre presuntas pretensiones territoriales de Pristina.
Hoy, como parte de todo ese andamiaje, se dio a conocer aquí que Serbia tuvo acceso a un documento secreto en el cual aparece una lista de países por presionar para que reconozcan la independencia unilateral proclamada por Kosovo en 2008 y otra con los aliados de Pristina señalados como ejecutores de esa tarea.
La noticia, publicada en el diario Srpski Telegraf, fue confirmada por el primer vicepresidente del gobierno y ministro de Asuntos Exteriores, Ivica Dacic, quien reveló que son 24 los susceptibles de ser coaccionados, entre ellos Armenia, Argelia, Bolivia, Egipto, Jamaica, México, Nepal, Eslovaquia, Tunez y Zambia.
También reveló que entre los encargados de esa labor están Austria, Estados Unidos, Alemania, Italia, Francia y Reino Unido.
El canciller declaró que Belgrado llamó a todos a prestar atención a este asunto con el recordatorio del problema que ello puede significar para las relaciones bilaterales y la advertencia de que seguirá con detenimiento todos los pasos.
Dacic también expresó que Pristina paga dos agencias de lobby, una en Francia y otra en Estados Unidos, para acciones a su favor en la esfera internacional.
(Tomado de Prensa Latina)