Por: Jose Luis Camellón
Durante sábado y domingo el ejercicio persigue trabajar en todo lo que puede causar riesgo y actualizar los planes de reducción de desastres
Todavía Sancti Spíritus sufre las afectaciones del huracán Irma y de la tormenta subtropical Alberto, fenómenos que ilustraron sobremanera los riesgos a que está expuesto el territorio en materia de fuertes vientos e intensas lluvias; pero tales huellas y vivencias no son agua pasada, sino que tal vez conformen la mejor base material de estudio para darle contenido real al Meteoro 2019 este fin de semana.
Con esas experiencias, el ejercicio enfoca el trabajo hacia todo lo que puede causar riesgo, de ahí que el énfasis principal para sábado y domingo sea desplegar acciones dirigidas a reducir vulnerabilidades y fortalecer las capacidades de la provincia y los territorios para enfrentar peligros de desastres de origen natural, tecnológico y sanitario.
Según expresó el mayor Roldán Rodríguez Luna, jefe del Órgano Provincial de la Defensa Civil, el Meteoro permite llevar a cabo la actualización de la documentación de reducción de desastres, profundizar en el conocimiento del nivel de riesgo de cada lugar y también actualizar las cifras y las medidas sobre dónde y cómo se protegen las personas, sus bienes y demás recursos económicos y patrimoniales.
Añadió Rodríguez Luna que la primera jornada estará dedicada también a la preparación de los órganos de dirección y mando en todos los niveles, la actualización de los planes para enfrentar la cercana temporada ciclónica, el acondicionamiento de esos puestos de dirección, el aseguramiento de las comunicaciones y además precisar las fuerzas y medios que cooperan con los Consejos de Defensa.
La agenda del Meteoro para el domingo prioriza preparar las diferentes categorías de personal en las acciones a desarrollar ante situaciones de desastres y la ejecución de actividades prácticas dirigidas a reducir vulnerabilidades en el territorio provincial.
“Este Meteoro significa higienización, limpieza, desobstrucción de zanjas, alcantarillas, canales, desagües; ver el mantenimiento de las micropresas y tranques. Se trata de trabajar en la solución de vulnerabilidades, donde se incluye la poda o tala de aquellos árboles que hoy constituyen peligro para los sistemas eléctricos y de comunicaciones”, señaló Rodríguez Luna. (Escambray.cu)