Tras el golpe de Estado en Bolivia este domingo, líderes mundiales han expresado su condena a tales hechos ocurridos en la nación andina. Entre ellos, Miguel Díaz-Canel, presidente de Cuba; Nicolás Maduro, presidente de Venezuela; el líder del Partido de los Trabajadores de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva; la líder colombiana Piedad Córdoba, el canciller cubano Bruno Rodríguez y la líder del partido Morena en México, Yeidckol Polevnsky, entre otros
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó que el mundo debe movilizarse para preservar la integridad física y la libertad de Evo Morales, víctima de un golpe de estado promovido por la derecha boliviana.
El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, expresó en su cuenta en Twitter: «Condenamos categóricamente el golpe de Estado consumado contra el hermano presidente @evoespueblo. Los movimientos sociales y políticos del mundo nos declaramos en movilización para exigir la preservación de la vida de los pueblos originarios bolivianos víctimas del racismo».
Por su parte, el expresidente brasileño y líder del Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, publicó en esa red social: «Acabo de escuchar que hubo un golpe de Estado en Bolivia y que el compañero @evoespueblo se vio obligado a renunciar. Es lamentable que América Latina tenga una élite económica que no sepa cómo vivir con la democracia y la inclusión social de los más pobres».
También, la líder colombiana Piedad Córdoba advirtió que: «Lo de Bolivia es un golpe de Estado a un Presidente electo. Con una oleada de violencia obligan a renunciar a Evo Morales. Que quede claro!! Van por el estaño, la plata, el cobre y toda la riqueza minera de Bolivia. Volverá el FMI, las privatizaciones, eliminarán subsidios!!»
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, fue uno de los primeros en manifestar el repudio de La Habana a la situación en Bolivia y expresó la solidaridad de la isla con el saliente mandatario, tras hacer un llamado a una «movilización mundial por la vida y la libertad de Evo».
En esa misma línea, la líder del partido Morena en México, Yeidckol Polevnsky, consideró que los acontecimientos en Bolivia son un «duro golpe a la democracia en América Latina» y un precedente para «el regreso a la violencia». «Exigimos respeto a la vida, la libertad y la integridad de los bolivianos», agregó.
La cancillería colombiana, por su parte, emitió un comunicado oficial para solicitar el acompañamiento de la comunidad internacional para «un proceso de transición pacífico» y la solicitud de una reunión urgente del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para hacer una análisis de los acontecimientos.
Por otro lado, el actual mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, aseguró que la renuncia de Morales era resultado de «las denuncias de fraude electoral», por lo que estimó que la dimisión era una «lección» sobre la necesidad «de contar los votos que se puede auditar».
La cancillería argentina se pronunció para avalar el informe de la OEA, que recomendaba la repetición de los comicios, y manifestar su deseo de que las nuevas elecciones se realicen «con todas las garantías de libertad y transparencia».