Recuerdan en Sudáfrica el inicio del fin del apartheid

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Por Ilsa Rodríguez Santana

Hace 30 años, el entonces presidente del régimen del apartheid Federik de Klerk declaró un día como hoy ante el parlamento que Sudáfrica necesitaba cambios y anunció que liberaría a los presos políticos opuestos al sistema de segregación racial.

En ese discurso en Ciudad del Cabo el político sudafricano, que había asumido la jefatura de Estado y Gobierno en 1989 y la ocupó hasta el 1994, dio a conocer reformas que conducirían a la añorada democracia en esta nación de África Austral.

Nueve días más tarde, Nelson Mandela y otros dirigentes antiapartheid que se encontraban encarcelados desde hacía 27 años recibieron la libertad, y entonces comenzó un período de negociaciones que resultaría en las elecciones democráticas, del 26 al 29 de abril de 1994, ocasión en la que por primera vez la mayoría de la población negra disfrutó el derecho del sufragio universal.

El resultado de esos comicios fue el previsible triunfo abrumador del Congreso Nacional Africano (ANC), un veterano movimiento en contra del régimen de segregación racial devenido partido político que dirige este país desde 1995, y la elección de Nelson Mandela como primer presidente negro de Sudáfrica.

Analistas locales subrayan que este día de 1990 marcó el inicio de una largamente esperada transición del apartheid a la democracia y abrió el camino para el nacimiento de una nueva Sudáfrica.

En ese anuncio ante el órgano legislativo, de Klerk eliminó también la ilegalidad dictada desde la década de 1960 contra el ANC, el Congreso Panafricanista y el Partido Comunista, cuyos militantes fueron perseguidos, asesinados y encarcelados durante ese difícil período de la historia nacional.

También anunció una moratoria de la pena de muerte y el fin del estado de emergencia.

Sudáfrica celebró el 11 de febrero de 1990 la liberación de Mandela quien fue aclamado por millares de partidarios que lo esperaban a la salida de la prisión de Poolsmoor, adonde había sido trasladado en 1982 desde la internacionalmente conocida cárcel de Robben Island.

Símbolo internacional de la resistencia, Mandela no aceptó un segundo período como Presidente, luego que en sus cinco años al frente del país desmontó la estructura social y política legado del apartheid, eliminó el racismo institucionalizado y luchó en contra de la pobreza y la desigualdad social.

Perteneciente a la casa real tembu de la etnia Xhosa, Mandela había rechazado en 1985 una oferta de libertad condicional del entonces presidente del apartheid Pieter Botha, por considerar que el político blanco no cambiaría su posición sobre el sistema de segregación racial que defendía a toda costa.

Mandela, quien era conocido como Madiba, falleció el 5 de diciembre de 2013 en su residencia de Johannesburgo.

La Fundación Nelson Mandela explica que Madiba fue un jefe thembu del siglo XIX y al llamar así al desaparecido Mandela representa señal de cariño y respeto. (Agencia Prensa Latina)