Recuerdan los cubanos memoria de madre del Apóstol de Cuba

Imagen: Radio Metropolitana.

Por: Rafael Novoa Pupo 

Hija de Antonio Pérez Monzón y de Rita Cabrera Carrillo, nació Leonor Antonia de la Concepción Micaela Pérez Cabrera el 17 de diciembre de 1828 en Santa Cruz de TenerifeIslas Canarias, en el seno de una familia económicamente desahogada aunque no rica, pues poseían algunas propiedades en casas y otros medios de vida.

Doña Leonor creció en Santa Cruz de Tenerife como una joven hermosa, inteligente, alegre, y de costumbres sumamente austeras. Sujeta a los cánones de una sociedad que discriminaba fuertemente a la mujer, aprendió las primeras letras en casa de unas amigas, a escondidas de sus padres, pues estos pensaban que la instrucción podía atentar contra las severas normas morales de la época.

Imagen: Internet

Cumplidos los 15 años de edad, llegó a Cuba con su familia. En una de las pocas fiestas a las que asistía, conoció al apuesto joven valenciano Mariano Martí y Navarro, se hicieron novios, y se casaron en febrero de 1852. Luego de consumar el matrimonio fueron a vivir en los altos de la Casa Natal de José Martí, en la calle de Paula No. 41.

Del matrimonio con Mariano Martí nacieron ocho hijos que se nombraron, en orden de nacimiento: José JuliánLeonorMariana Matilde (Ana), María del Carmen (La Valenciana), María del Pilar (Pilar), Rita Amelia (Amelia), Antonia Bruna, y Dolores Eustaquia (Lolita).

En 1857 la familia se traslada a España, donde permanecerán hasta 1859 en que regresan a La Habana. En 1874 se establecen en México, donde se les une José Martí, quien había sido deportado a España en 1871 debido a sus actividades conspirativas. Más tarde, en 1877, la familia regresa nuevamente a La Habana.

Al quedar viuda el 2 de febrero de 1887, casi completamente ciegasin recursos, y desamparada totalmente de toda ayuda oficialDoña Leonor pasó sus últimos años de vida en compañía de su hija Amelia, sumida en la pobreza. Nunca recibió amparo alguno de la República que su hijo concibió para los cubanos, y ellamujer de entereza y rebeldía, creadora con su esposo de una familia de muchos descendientes honestos, casi todas hembras, nada reclamó al gobierno.

A las 5:30 de la tarde del 19 de junio de 1907sentada en una amplia poltrona de la sala de la casa de su hija Amelia, serenamente se quedó dormida para siempre Doña Leonor Pérez Cabrera, madre del Héroe Nacional cubanoJosé Martí.

Sólo al morir, el Gobierno Interventor norteamericano encabezado por su gobernador Charles Magoon, publicó una insincera nota necrológica, en la que se dispuso guardar duelo oficial y que fuera sepultada a cuenta del Ayuntamiento habanero. Fue un pomposo sepelio que contrastó con la miseria en que ella vivió, durante sus últimos años.

Ante este acto, el pueblo habanero mostró sincera angustia, y expresó su disgusto por la presencia del representante del gobierno de Estados Unidos y de tanto politiquero corrupto, en los funerales de la madre del más fecundo líder revolucionario, y antiimperialista cubano.