Por: Joaquín Gómez Serra
Ni la quietud y tranquilidad de las gradas del estadio José Antonio Huelga serán un medidor de la temperatura que tomará, desde martes a jueves, la subserie particular entre Los Gallos de Eriel Sánchez y los campeones nacionales, el Matanzas, de Armando Ferrer.
Los asiduos seguidores del pasatiempo nacional por la tierra del Yayabo se hacen varias interrogantes: ¿podrá el picheo espirituano ante la fuerte toletería de los rojos de la tierra de los puentes?, ¿los anémicos números de Los Gallos revertirán sobre el terreno el zigzag de estos inicios de campaña?, o ¿las espuelas de Los Gallos harán sangrar a sus rivales o el Cocodrilo le dará varias dentelladas?
Y como en el béisbol la correlación de fuerzas entre equipos se mide por las estadísticas, comencemos echándole un vistazo. Para nadie es un secreto que ésta será la verdadera primera prueba de fuego de Sancti Spíritus en esta 60 Serie Nacional, amén de que los Cocodrilos los superan número a número en los renglones de juego, llámense ofensiva, pitcheo y defensa.
Los Cocodrilos, con 5 triunfos y sólo dos derrotas marchan segundos en la tabla de posiciones empatados con otros tres equipos, mientras los ahijados del manager Eriel Sánchez se ubican sextos, con 4 sonrisas y 3 descalabros, abrazados con las nóminas de Granma y Guantánamo.
Los yayaberos sólo presentan buenos dividendos particulares ante Villa Clara, al superarlos 2-1, mientras se abrazaban con un triunfo y una derrota per cápita frente a Cienfuegos y Mayabeque.
Mientras, los matanceros, con 5-2, perdieron en el debut 0-2 frente a Los Toros, de Miguel Borroto, y eslabonaron una racha de cinco triunfos en línea a costa de elencos, considerados poderosos, como Las Tunas y Ciego de Ávila.
Las estadísticas no dejan margen a la superioridad de los rojos. Colectivamente, a la ofensiva son cuartos en average (.331) y total de bases (129), segundos en sluggins (.533) y líderes en cuadrangulares (13) e impulsadas (58).
Ese poderío ofensivo unido a lo certero de su defensa, primeros a nivel de país, con sólo 3 errores y average de 989, acorazan a un staff de lanzadores que trabaja para 4.43, con un WHIP de 1.41, muy superior a la media del país (5.39 pcl y 1.67), mientras bate en mano los rivales le promedian para 268, inferior a la media del campeonato (300), muy elevado en estos inicios de campaña.
Si nos ha seguido hasta aquí se preguntará ¿y cuáles son las cartas de presentación de Los Gallos ante sus rivales de turno? Muy escasas. A la ofensiva batean sólo 284, 49 puntos porcentuales menos, sólo tienen 2 cuadrangulares, ambos de Frederich Cepeda, 76 bases recorridas por sus conexiones, inferior 53 veces a los matanceros, anémico sluggins de 378 y sólo 29 remolques para el home plate en siete partidos, mientras han dejado a 93 corredores en posición anotadora.
Defensivamente Sancti Spíritus marcha en el puesto 12, con nueve errores y promedio de 966, inferior a la media del torneo que lo hace para 972, con sólo seis jugadas de doble matanzas, décimo terceros del país.
Desde la lomita del diablo, pocos lanzadores para no ser absolutos, han dejado una buena estela en sus salidas. Presentan 5.34 carreras limpias permitidas cada nueve entradas de actuación, un alto WHIP de 1.73, mientras los bateadores se han dado gusto con sus lances, al promediar para 309, les han anotado 46 carreras, de ellos 35 limpias.
Los abridores espirituanos, tienen sólo un triunfo y tres derrotas, trabajan para 5.35 pcl, les han disparado 46 hits, le batean para 317, permiten 21 carreras, con 8 biangulares y tres cuadrangulares.
Por su parte, los relevistas tienen 3 sonrisas sin juegos perdidos, en lo personal Yankiel Mauri, ha ganado 2, mientras el zuro Yoanni Hernández tiene 1 triunfo, y el relevista trinitario Yanieski Duardo acumula dos salvamentos.
Las cartas de triunfo para este martes son: el espirituano Pedro Álvarez, con 4.05 pcl, sin decisiones en la campaña, se medirá ante el efectivo Dariel Góngora (1-0), una lechada, en 7 entradas de labor permitió 4 hits y sus rivales sólo le batean para 167.
A pesar de lo negativo de todos estos números, y que Matanzas acumula 14 triunfos de forma consecutiva en los predios del estadio Victoria de Girón, aquí en la tierra del Yayabo otro Gallo ha cantado, al presentar los actuales campeones 6 derrotas al hilo en el Coloso de Los Olivos. Entonces, confiemos en nuestros Gallos, porque saben pelear en su “valla” y de todo puede pasar.