La presidenta del Partido de los Trabajadores de Brasil, Gleisi Hoffmann, defendió hoy la destitución del mandatario ultraderechista Jair Bolsonaro por emplear un órgano gubernamental para proteger a uno de sus hijos, acusado de corrupción.
‘Gravísima la denuncia de que la ABIN presentó informes a los abogados de Flávio Bolsonaro para solicitar la anulación del caso Queiroz’, escribió Hoffmann en el servidor para microblogging.
Manifestó que ‘el presidente está usando la agencia nacional de inteligencia para ayudar a su hijo investigado. Esa es razón más que suficiente para el impeachment (destitución)’, remarcó.
Al menos cuatro partidos opositores pidieron a la Fiscalía General que investigue si la ABIN ayudó en la defensa al descendiente del jefe de Estado.
La solicitud fue presentada por los partidos de los Trabajadores, Socialista Brasileño, Socialismo y Libertad, y Novo.
Tal demanda se basa en un reportaje de la revista Época, según el cual la ABIN auxilió al asambleísta para preparar su defensa en un caso de desvío de dinero público que lo persigue desde su etapa de diputado en Río de Janeiro.
Se sospecha que Flávio Bolsonaro dirigió un esquema de corrupción y se benefició de la devolución de parte de los sueldos de su oficina cuando todavía era representante estatal del 2003 al 2019.
De acuerdo con la Fiscalía, el expolicía Fabrício Queiroz, arrestado en junio, sería el operador del plan.
El caso salió a la luz a finales de 2018, después de que el organismo de control de movimientos financieros (COAF) descubriera giros atípicos millonarios en 2016 y 2017 en una cuenta bancaria de Queiroz, exconsejero de Flávio Bolsonaro.