La Fiscalía Delegada ante la Corte Suprema de Justicia de Colombia lleva hoy una treintena de procesos contra 22 generales del Ejército por su presunta relación con los llamados falsos positivos.
Las investigaciones sobre los falsos positivos no incluyen solo a instancias de la justicia colombiana, sino también a entes globales como la Corte Penal Internacional (CPI).
En días recientes Fiscalía General de la Nación envió a la CPI reportes en los que informa acerca de los más de dos mil procesos abiertos contras casi 11 mil militares en relación con tres mil 966 víctimas de ejecuciones extrajudiciales.
Entre las referidas investigaciones figuran las abiertas contra los 22 generales por los supuestos crímenes cometidos desde 2002.
Resulta entonces curioso que varios de ellos resultaran ascendidos en los últimos años a pesar de la gravedad de las acusaciones en su contra, catalogadas como crímenes de lesa humanidad por varias organizaciones defensoras de los derechos humanos.
Para hacer efectivos los ascensos el Ministerio de Defensa debe contar con el visto bueno del Senado), que hizo la vista gorda ante las acusaciones e investigaciones.
La justicia colombiana informó, además, que como resultado de las investigaciones relacionadas con los falsos positivos hasta septiembre último fueron condenados mil 794 miembros de las Fuerzas Armadas.