
Por: Joaquín Gómez Serra
Trinidad es cuna de la educación física, y se puede vanagloriar de contar con profesores de la talla de Rodelsi Beltrán, profesor vanguardia nacional, en un municipio donde por muchos años se ha forjado una gran cantera de estos jóvenes valores, y que hoy tienen en formación a nueve de ellos en la Escuela de Profesores de Educación Física Manuel “Piti” Fajardo en Sancti Spíritus.
En la Villa Patrimonio de la Humanidad estos hombres y mujeres explotan dos vertientes de trabajo muy amplias como son el deporte para todos y las composiciones gimnásticas que forman parte de las actividades masivo gimnástico deportivas.
Y como dice el sitio Educa físicamente Trinidad, casi a las puertas de la reapertura del curso escolar el venidero día 18, cuando se vuelva a las aulas, a las canchas, patios y a los terrenos acondicionados para llevar a hecho la labor del profesor de educación física, habrá que hacer hincapié en el fomento en los alumnos el amor hacia el deporte cubano y sus logros, poniendo en lo más alto la entereza de nuestros atletas, que son el ejemplo vivo para las generaciones de hoy y del mañana.
Desde la clase de Educación Física cada profesor debe convertirse en un cultivador de valores en los educandos, porque también son una parte importante en esa pirámide hacia el más alto rendimiento deportivo.

Volver a inundar » Nuestros Espacios» de la fuerte algarabía de los niños, niñas, adolescentes, jóvenes y junto con ello darle un toque de vida al movimiento deportivo cubano, que parte desde ahí, en la comunidad, en el barrio, en la escuela, en las áreas deportivas. La meta es formar hombres de bien y campeones de la dignidad.
Y bajo la máxima del apóstol cubano de “que si el hombre sirve, la tierra sirve”, la educación física fue uno de los temas fuertemente abordados en el último seminario provincial, en una Cuba, que después del triunfo de la Revolución, se planteó la firme decisión de llevar la educación física y el deporte a todo el pueblo y de que este tuviera un carácter científico.
Esa es una vieja aspiración del sistema educacional cubano que trabaja mancomunadamente con el deporte en una aspiración que constituye una necesidad objetiva para la construcción de la sociedad socialista por lo que nuestro país dirige sus principales acciones a garantizar la creación de oportunidades y posibilidades para todos, sin exclusión de ninguna persona, raza o sexo, elevando a planos superiores la calidad de vida de nuestro pueblo, en busca de un deporte participativo que llegue a todos los rincones, hasta los más recónditos de Trinidad, Sancti Spíritus y de toda Cuba.
El punto de partida obligado en el análisis de las transformaciones de la sociedad cubana, lo constituye las primeras medidas sociales implementadas con el triunfo de la Revolución, que aseguraron el camino para la plena integración social de todos sus ciudadanos, los logros sociales alcanzados, especialmente en el campo de la educación, cultura física y el deporte, se deben a la aplicación sistemática de una política social para todos, con el estado, como fuente principal que garantiza su ejecución a través de la coordinación de las acciones de los diferentes organismos e instituciones, que destinaron y destinan importantes recursos.
El deporte participativo, masivo o deporte para todos tiene como objetivo lograr una mayor eficiencia de los servicios de la Educación Física, tanto escolar como de adultos, aumentando la opción para consumo de tiempo libre, la promoción de salud, y el nivel de eficiencia física de la población, que propicie la selección de posibles talentos deportivos.
Teniendo en cuenta que en las edades de 10-11 años se presenta una mayor aceleración en los procesos de aprendizaje motriz de los niños el maestro debe prestar una mayor atención a ellos.
En aras de alcanzar el desarrollo de las capacidades físicas, habilidades motrices básicas y deportivas, la formación de intereses hacia la práctica sistemática deportiva y recreativa, así como la formación de valores y cualidades del carácter que conllevan a alcanzar una madurez más completa.
El llamado está hecho, la educación física y su profesor no pueden ser más meros atributos en un sistema donde el deporte es derecho de todo el pueblo, y tiene que retomar su lugar de privilegio porque mente sana en cuerpo sano, y eso se empieza a “construir” desde edades tempranas, vinculando el ejercicio y el deporte a su modo de vida.
Como dijera nuestro atleta mayor Fidel Castro: “es necesario que cada uno de ustedes, allí en la pista. en la cancha, en el campo o donde sea, piensen en lo que defienden, piensen por lo cual se lucha y sean capaces, en ese momento supremo del esfuerzo, de dar todo lo que el ser humano puede dar».