Este deportista trinitario ganó la medalla de bronce, en los 71 kilogramos, en el Campeonato Mundial Juvenil de Boxeo deporte de los puños, Nucía 2022, España
Por: Joaquín Gómez Serra
Esta es una semana histórica para el poblado de Palmarito, en Trinidad. Pioneros, niños, jóvenes, familiares, pueblo en general, junto a una representación del INDER, salieron a las calles a recibir al primer medallista de ese terruño, enclavado dentro del Consejo Popular San Pedro, en el Plan Turquino sureño.
El motivos del convite fue la bienvenida masiva al boxeador Pedro Alexis Veitía Llorente, atleta que inscribió a Palmarito en los anales mundiales del deporte juvenil de los golpes y las esquivas, al ganar este joven en el certamen del orbe, celebrado en Alicante, España, la medalla de bronce en los 71 kilos.
Cuando el lada rojo, de Ángel Vidal Castillo, subdirector general del alto rendimiento en la Dirección Provincial de Deportes, echando atrás terraplenes y polvo, llegó a su pueblo, y Pedro Alexis Veitía bajó del carro, el bullicio inundó el terruño.
Pioneros ataviados de sus uniformes, niños que lo ven y sienten como su ídolo comenzaron a vitorear; “Se oye, se siente, Pedrito está presente”. En la mente de sus seguidores estaban muy claritas las peleas que este boxeador trinitario trasmitió por su perfil de Facebook. Veitía, aunque no pudo llegar al oro, los hizo vibrar, y se convirtió en el primer medallista en la historia deportiva de Palmarito.
Entonces, se puede hablar de un antes y un después. Eso lo hicieron saber los habitantes del terruño natal de Veitía. Para el recibimiento llegaron Dunia Jiménez Ramos, miembro del Buró Municipal del PCC en Trinidad, que atiende la esfera social, Lilian Morales Iznaga, miembro del Buró Municipal del SNTECD, Ángel Vidal Castillo, subdirector provincial de Alto Rendimiento, Frank Pérez, comisionado provincial de boxeo, así como miembros de la Dirección Municipal de Deportes de Trinidad, y del Combinado Deportivo Conrado Benítez García, de Caracusey.
En esa hora de recuento se rememoraron las peleas de la joven promesa de las doce cuerdas trinitarias, que inició el Mundial Juvenil en los 71 kilogramos con un RSC en el segundo asalto ante el boxeador lituano Nidas Marma.
Y el metal bronceado que Veitía exhibía en su pecho llegó sobre el entarimado de las doce cuerdas en la tierra del mejor turrón del mundo, en Alicante, España, al doblegar por votación unánime de los imparciales (5-0) al kazajo Yegor Yegorov, dejando listo el camino para el enfrentamiento por la presea plateada ante el boxeador de Uzbekistán, Fazliddin Erkinboev, con el cual perdió por votación de los jueces 3.0.
De esta forma, Veitía hizo historia al andar en tierras ibéricas al subir al podio de premiaciones las esperanzas de la tierra que lo vio nacer, crecer y formarse como un púgil, en su Palmarito, lindo y querido. Y bajo el bullicio de la vitalidad de sus niños, Veitía se oyó, se sintió, portó la bandera cubana sobre sus hombros, y se comprometió con su pueblo, a seguir aportándole triunfos al boxeo trinitario, espirituano, y ya sueña en grande con vestir las franelas tricolores de Cuba en venideros certámenes mundiales de mayores.