Autoridades de Estomatología en el territorio advierten que no se aceptarán bulbos no certificados por las instituciones sanitarias correspondientes y alertan sobre el riesgo de adquirirlas en el mercado informal
Por: Yosdany Morejón Ortega
Que en Revolico un frasco de anestesia dental cueste entre 500 y 600 pesos ya no asombra a muchos, especialmente a quienes lo han adquirido en un intento desesperado por poner fin a un dolor de muela, o de diente.
Y es que, como parte de las medidas adoptadas por el país ante la actual crisis económica y el desabastecimiento, sobresale la autorización excepcional y con carácter temporal de la importación por la vía del pasajero de los alimentos, artículos de aseo y medicamentos, sin límite de valor de importación y libre de pago de aranceles.
No obstante, algunos han hecho caso omiso de la advertencia: “sin fines comerciales” y olvidan que ciertos medicamentos como la anestesia pueden poner en riesgo la vida de una persona, por lo cual no deberían ofertarse tan a la ligera, como si de una aspirina se tratase.
Cada vez son más los espirituanos que hacen uso de las redes sociales para adquirir fármacos y es comprensible ante el déficit, pero ojo con algunos.
La persona que hoy adquiera en el mercado negro un bulbo de anestesia dental corre el riesgo de perder su dinero porque no le será administrada en ningún punto odontológico del país, confirma Dariel Álvarez Rojas, jefe de la sección provincial de Estomatología.
“En nuestra provincia, al igual que en el resto de Cuba, se aceptan recursos médicos para su uso en centros hospitalarios y, por supuesto, estomatológicos —que puedan entrar importados por personas naturales desde el exterior—, tales como la amalgama y la resina, que no comprometen la vida del paciente”.
“Sin embargo, la anestesia dental, por la forma en la cual se le administra al paciente —que va directamente al nervio a través de técnicas infiltrativas—, sí puede poner en riesgo la vida de la persona, por lo que solo empleamos la que tenemos certificada por la Autoridad Reguladora de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos de la República de Cuba (Cecmed)”.
Refiere el especialista que a cada frasco de anestesia se le verifica la fecha de vencimiento, entre otros datos de interés suministrados en el envase del producto y, claro, certificado por la referida institución.
No obstante, acota, en no pocas ocasiones los frascos que traen las personas a las clínicas para una extracción dental adolecen de información complementaria, lo cual resulta en extremo peligroso.
“Y en ocasiones también la forma de administrar este medicamento importado es muy diferente a la que empleamos en Cuba, con dosis diferentes”.
Esta situación impide que se acepten entonces los bulbos de anestesia dental que no sean de producción nacional y certificados por la Autoridad Reguladora de Medicamentos del país, en las siete clínicas estomatológicas y los 14 servicios dentales ubicados en policlínicos de la provincia.
Álvarez Rojas reconoce el déficit que ha presentado la anestesia en los puntos estomatológicos de Sancti Spíritus durante los últimos tiempos y explica que en estos momentos se reparte en las clínicas, tras su reciente arribo a este central territorio.
“Acaba de entrar anestesia y va a llegar a todas las unidades de la provincia. La misma no solo será empleada para procedimientos de urgencia, sino para todo paciente que necesite una extracción dental; así como para otros procedimientos que también demanden su uso, como la pulpotomía.
“Según nos informó nuestra asesora nacional, en este 2023 deberán entrar recursos al país como la amalgama y la resina, que no son de producción nacional y dependen de importaciones. Aunque en el 2022 no cumplimos con las expectativas de la población, se priorizaron embarazadas, menores de 19 años, adultos mayores y discapacitados”.
Según la literatura técnica y desde un punto de vista odontológico, la anestesia consigue la abolición de la sensibilidad dolorosa de una determinada zona del organismo y facilita determinados procedimientos como la extracción dental. (Tomado de Escambray).