El nueve de marzo de 2014 fallece la Heroína del Moncada Melba Hernández Rodríguez del Rey, una de las más gloriosas combatientes de la gesta revolucionaria, ejemplo imperecedero de la mujer cubana
Por: Rafael Novoa Pupo
Melba Hernández Rodríguez del Rey, la Heroína del Moncada falleció el 9 de marzo de 2014, una mujer que todo el que la conoció destacó en ella su trato amable y cariñoso. Mucho es lo que podría escribirse de esta valiente revolucionaria que estuvo siempre en la vanguardia de su generación, heroína del Asalto al Cuartel Moncada y de la República de Cuba, Doctora Honoris Causa del Instituto Superior de Relaciones Internacionales, embajadora, fundadora del Partido Comunista de Cuba, miembro del Comité Central desde su Tercer Congreso, y diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular hasta su deceso.
Nació en Cruces, en la entonces provincia de Las Villas, el 28 de julio de 1921 en una familia de estirpe mambisa y se graduó de abogada en la Universidad de La Habana en 1943 y también de Licenciada en Ciencias Sociales.
Fue de las primeras en integrar las filas del movimiento revolucionario dirigido por Fidel en la lucha contra la tiranía batistiana. Junto a Haydée Santamaría, estuvo entre los combatientes de la gesta del 26 de julio de 1953.
Condenada a prisión en el Reclusorio Nacional para mujeres de Guanajay, tras su excarcelación Melba tuvo un papel decisivo en la recopilación y organización de las notas que Fidel iba logrando sacar del Presidio Modelo, en las que reconstruía su alegato conocido como La Historia me absolverá, así como también en su posterior impresión y distribución clandestina.
En mayo de 1955, integró la primera Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio, y el 25 de noviembre de 1956 despidió, en el puerto de Tuxpan, a los expedicionarios del Granma. Se incorporó al Ejército Rebelde en el Tercer Frente Mario Muñoz Monroy, y tras el triunfo de la Revolución desempeñó importantes responsabilidades, entre ellas Presidenta del Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam del Sur primero, y después de Vietnam, Cambodia y Laos; Secretaria General de la Organización de Solidaridad con los Pueblos de Asia, África y América Latina y embajadora de Cuba en la República Socialista de Vietnam y en Kampuchea.
Fue fundadora del Partido y miembro de su Comité Central desde el Tercer Congreso, diputada a la Asamblea Nacional desde 1976 hasta 1986, y elegida nuevamente desde 1993. Por sus relevantes méritos recibió numerosos reconocimientos, entre estos los títulos honoríficos de Heroína del Trabajo y Heroína de la República de Cuba.
Sus cenizas se encuentran en el cementerio Santa Ifigenia, de Santiago de Cuba, en el Mausoleo de los Mártires de la Revolución, junto a sus compañeros caídos en la gesta del Moncada, adonde el pueblo va a rendirle tributo asiduamente.
La sencillez, el humanismo y la inalterable fidelidad a la Revolución que la caracterizaron continuarán en el recuerdo de los cubanos y cubanas para velar por la patria y la continuidad de una obra que contribuyó a levantar con su vida. (Con información de PCC, Granma, Cubadebate y periódico 26).