Líbano: Colapso bancario e inseguridad económico-social

Líbano: corrupción, pobreza, blanqueo de fondos, crisis. Foto: Prensa Latina.
Líbano: corrupción, pobreza, blanqueo de fondos, crisis. Foto: Prensa Latina.

Malversación de fondos, falta de liquidez en el banco, y políticas monetarias que arrastran al país al actual colapso, bajo el amparo de la administración estadounidense y de la clase gobernante, caracterizan la situación de Líbano

A sus 70 años, Mustafa y su familia buscan sobrevivir en Líbano ante la disminución del poder adquisitivo, los altos precios de los artículos de primera necesidad y la pérdida de los derechos sociales.

Por: Yodeni Masó Águila*

El veterano docente acude cada mes al cajero en busca del equivalente a 100 dólares de jubilación y en el banco sus fondos no existen, tras la falta de liquidez del Banque du Liban desde 2019.

Ante el deterioro de la crisis, el profesor decidió acompañar en el presente el movimiento de jubilados militares y del sector público para exigir corrección de sus salarios, adoptar un tipo de cambio al dólar, otorgar un subsidio unificado por costo de vida; así como garantizar créditos para necesidades médicas y la elevación de la ayuda financiera escolar para sus hijos.

Gran parte de los libaneses responsabilizan al gobernador del Banco Central, Riad Salameh, y a sus políticas monetarias de arrastrar al país al actual colapso, bajo el amparo de la administración estadounidense y de la clase gobernante, precisaron expertos.

Riad Salameh, gobernador del Banco Central de Líbano. Foto: Prensa Latina.
Riad Salameh, gobernador del Banco Central de Líbano. Foto: Prensa Latina.

Pese a las denuncias y citaciones en su contra, Salameh continúa en el cargo desde 1993, para figurar como uno de los jefes de bancos centrales en el mundo con más años en el puesto. Su mandato debe finalizar en julio venidero.

BUSCANDO PISTAS

Desde fines de 2021, investigadores en Suiza, Francia y Luxemburgo indagan en la trayectoria de Salameh por sospecha de malversación de fondos.

Hace un año, la agencia de cooperación de justicia penal de la Unión Europea ayudó a congelar unos 132 millones de dólares en activos de libaneses en Francia, Alemania, Luxemburgo, Mónaco y Bélgica, que incluyen propiedades y cuentas bancarias.

La medida está vinculada con la investigación de lavado de dinero que relaciona a cinco ciudadanos, entre ellos Salameh, bajo cuestionamientos de malversar alrededor de 330 millones de dólares.

A inicios de 2022, la jueza libanesa Ghada Aoun congeló algunos bienes del gobernador como medida de prevención y prohibió la salida del país hasta que no concluyan las investigaciones por sospecha de blanqueado de dinero.

BLANQUEO DE FONDOS

De acuerdo con el analista Hassan Olleik, Riad Salameh y su hermano, negocian con bancos europeos desde 1993, entre ellos el HSBC y Julius Baer Group Ltd. en Suiza, el BNP-PARIBAS en Francia, y en Luxemburgo.

En un video divulgado en su canal independiente de YouTube Al Mahatta, el periodista puntualizó que estas instituciones son socias de Salameh en la operación de lavado de dinero por cerca de 19 años hasta 2020.

Por petición del primer juez de instrucción de Beirut, Charbel Abu Samra, el gobernador Salameh acudió a una audiencia en marzo de este año en presencia de expertos europeos, quienes llegaron por segunda vez al país como parte de investigaciones sobre la riqueza del dirigente bancario.

A principios de 2023, especialistas de Francia, Alemania y Luxemburgo escucharon aquí a testigos, incluidos gerentes y empleados actuales y anteriores del Banco Central, en averiguaciones sobre casos de lavado de dinero y malversación de fondos relacionados con Salameh.

Los europeos dan seguimiento a la relación del Banco Central y la empresa FORE & Associates, registrada en Islas Vírgenes con oficina en Beirut, cuyo beneficiario es Raja Salameh, hermano del gobernador.

Banco Central de Líbano. Foto: Prensa Latina.
Banco Central de Líbano. Foto: Prensa Latina.

Se cree que la entidad cumplió el papel de intermediaria para la compra de bonos del Tesoro y Eurobonos del Banco Central al recibir una comisión de suscripción, la cual fue transferida a las cuentas del gobernador en el exterior, divulgaron medios de prensa.

A juicio de Olleik, hubiera sido mejor que el poder judicial nacional fuera el primero en preocuparse por la investigación de los bancos europeos, el Banco Central francés y su exgobernador, y con BNP, HBC Suiza y otros que fueron socios de Riad Salameh durante cerca de dos décadas en el robo del dinero de los libaneses.

AGUDIZACIÓN DE LA CRISIS

Los analistas apuntan que en el colapso libanés influyó el sector bancario con muchas instituciones prestamistas acusadas de participar en prácticas de lavado de dinero, evasión fiscal y malversación.

Con el inicio de la crisis y las manifestaciones populares en octubre de 2019, observadores acusaron a líderes y funcionarios, incluido Salameh, de transferir enormes sumas de dinero hacia el extranjero, divulgó el canal Al Manar.

Partidos, analistas y libaneses en general responsabilizaron al gobernador del desplome de la moneda nacional en más del 95 por ciento de su valor frente al dólar estadounidense y criticaron duramente las políticas monetarias diseñadas y adoptadas por Salameh.

Durante casi tres años, los bancos en el país impusieron restricciones sobre el dinero de los depositantes en moneda extranjera, especialmente el dólar y establecieron estrictos límites para retirar sus fondos en libras libanesas.

En paralelo, las autoridades levantaron los subsidios al combustible, productos básicos y medicamentos.

Por otra parte, el Ministerio de Economía adoptó desde marzo los precios en dólares en las tiendas comerciales y el dólar aduanero ascendió a 15 mil para abandonar la tasa de mil 500 utilizada desde 1997.

Según especialistas, la unificación de los múltiples tipos de cambio es uno de los tantos pasos que el Fondo Monetario Internacional solicitó a Líbano para concluir un paquete de ayuda de tres mil millones de dólares.

Ante este panorama, el secretario general del Partido de Dios (Hizbulah), Hassan Nasrallah, denunció la implicación de Estados Unidos en la corrupción interna, además de provocar la crisis monetaria y económica actual, obstaculizar la inversión y la ayuda externa.

La parálisis política impide dar pasos de reforma y exacerba la complejidad de la situación, a la luz de un vacío presidencial desde el 31 de octubre anterior y bajo la dirección de un gobierno interino.

En medio del escepticismo, Mustafa y la mayoría de los libaneses aguardan por la designación del próximo jefe de Estado, mientras alzan la voz en rechazo a la clase corrupta y en defensa de sus derechos de vida.

*Corresponsal jefe de Prensa Latina en Líbano.