Aniversario 154 de la caída en combate de Marcos Maceo

Composición fotográfica: Instituto Cubano del Libro.
Composición fotográfica: Instituto Cubano del Libro.

Era el padre de los heroicos combatientes mambises de la estirpe Maceo Grajales, el esposo de Mariana Grajales, la Madre de la Patria

Por: Rafael Novoa Pupo

Este 14 de mayo se cumplen 154 años de la caída en combate contra tropas españolas en San Agustín de Aguarás, antigua provincia de Oriente, del sargento del ejército libertador Marcos Maceo Joglar, padre de los heroicos combatientes mambises Maceo Grajales.

Hijo de un valenciano y una mulata santiaguera. Marcos Evangelista Maceo nació en Santiago de Cuba el 25 de abril de 1808, según consta en la partida bautismal 68 del Libro de Pardos 8 (1804-1820) de la parroquia de Santo Tomás Apóstol.

De la unión de Marcos con Mariana, viuda entonces de Fructuoso Regueiferos, nacieron diez hijos: Antonio, José, Baldomera, Rafael, Miguel, Julio, Dominga, Tomás, Marquito y María Dolores, fallecida a los pocos meses de nacida.

De gloriosa estirpe, Marcos Maceo, poseía una estructura gruesa y de color pardo. Mostraba modales reposados, trato fino y era de poco hablar. Además, tenía fama de hombre honrado a toda prueba, lo que le otorgó una notable reputación, a la familia.

Con 60 años de edad, al momento de su caída en combate cuando atacaban el fuerte español en esa localidad del actual municipio holguinero de “Calixto García”, el Sargento Marcos Maceo peleaba bajo las órdenes de su hijo, el entonces Teniente Coronel Antonio Maceo Grajales.

De acuerdo con testimonios ofrecidos por testigos presenciales, las últimas palabras pronunciadas por Marcos poco antes de morir, estaban impregnadas de una fuerte carga de amor hacia su esposa y la causa de la independencia de Cuba: “Díganle a Mariana que yo cumplí con ella y con la Patria”.

Con el paso del tiempo, la mayoría de los hermanos Maceo Grajales murieron luchando por la independencia de su patria, en la guerra de 1868 o la de 1895, cumpliendo de esa heroica forma con el compromiso hecho con Mariana ante la imagen de Cristo y honrando el legado de su padre. (Con información de cubaminrex y Ecured).