Maceo y el Che: Símbolos de heroísmo y continuidad revolucionaria

Antonio Maceo Grajales y Ernesto Che Guevara de la Serna, dos hombres unidos por un mismo ideal, combatieron sin límite contra toda forma de colonialismo y por la libertad de Cuba

Por: Rafael Novoa Pupo

Aun cuando vivieron diferentes épocas, no es posible abordar en la historia de Cuba la efeméride del 14 de junio, sin hacer alusión a dos grandes figuras relevantes de la patria: Antonio Maceo Grajales y Ernesto Che Guevara de la Serna. Dos hombres que unidos por un mismo ideal, combatieron sin límite contra toda forma de colonialismo, renunciando incluso a la familia y su propia existencia.

Ambos combatientes conforman un paradigma para toda nación que ansíe o luche por afianzar su soberanía. El General mambí vino al mundo el 14 de junio de 1845 en la ciudad de Santiago de Cuba. Durante su infancia y adolescencia, cursó estudios obteniendo una cultura elemental, que le posibilitó responsabilizarse con la administración de la finca perteneciente a su familia, y dedicarse a la comercialización de productos agrícolas.

A pocas horas de haberse producido el alzamiento del 10 de octubre de 1868 en La Demajagua, su valentía, entrega, disciplina y virtudes como estratega militar, le propiciaron adquirir el grado de Mayor General, y obtener valiosos puestos dentro del Ejército Libertador en la región oriental del país.

El 15 de marzo de 1878, Antonio Maceo fue el principal protagonista de la Protesta de Baraguá, al oponerse al Pacto del Zanjón, documento que ofrecía decretar la paz sin contemplar la independencia de la isla, ni la abolición total de la esclavitud. Tal decisión no pudo impedir el fracaso de la Guerra de los Diez Años.

Luego estando en el exilio durante la tregua fecunda, en 1893 se asoció al proyecto revolucionario de José Martí y regresó a Cuba a principios de 1895, en una expedición dirigida por Flor Crombet.

Al comenzar la Guerra Necesaria en 1895, Maceo ocupó el cargo de Lugarteniente General del Ejército Libertador, asumiendo el mando de la Columna Invasora, que partió desde Mangos de Baraguá, llevando la hazaña de extender la lucha, a toda la isla. El Titán de Bronce, cayó combatiendo el 7 de diciembre de 1896 en San Pedro de Punta Brava, La Habana. Durante su trayectoria como militar, participó en más de 600 combates y recibió en su cuerpo 26 heridas de guerra.

En tanto Ernesto Guevara de la Serna, también nació el 14 de junio, pero de 1928 en Rosario, Argentina. Durante su niñez y juventud cursó diferentes estudios hasta obtener el título de médico. Viajó por varias naciones latinoamericanas, momentos que le sirvieron para relacionarse y comunicarse con diferentes figuras y fuerzas progresistas del continente.

Ya establecido en México, conoce al joven abogado Fidel Castro y enseguida comenzó a compenetrarse con la causa del Movimiento Revolucionario 26 de Julio. El Che formó parte de los 82 expedicionarios del yate Granma que desembarcaron en Cuba el 2 de diciembre de 1956, destacándose en el combate de Alegría de Pío.

Ya establecido en la Sierra Maestra en la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista, el Che mostró sus cualidades para la guerra de guerrillas, lo cual le valió para ser nombrado comandante y se le otorgara el mando de tropas, hasta que asumió el mando de la Columna Invasora número 8, Ciro Redondo. En tan solo 47 días y bajo la constante metralla del enemigo, logró trasladarse desde la Sierra Maestra hasta los macizos del Escambray, donde desarrolló una exitosa campaña que culminó con la toma de Santa Clara, el primero de enero de 1959.

Luego de producirse la derrota de la dictadura batistiana, Fidel convoca a una Huelga General Revolucionaria, y le ordena al Che marchar hacia La Habana, arribando a la capital del país el 3 de enero de 1959, momento en que ocupó la Fortaleza de San Carlos de La Cabaña.

Durante el inicio del proceso revolucionario, asumió diferentes responsabilidades en la dirección del país, tales como: presidente del Banco Nacional de Cuba, jefe militar de la región de Occidente y Ministro de Industrias, entre otras.

A mediados de la década de sesenta, se traslada hacia el exterior para fomentar la lucha guerrillera en el Congo y Bolivia, nación suramericana en la cual es asesinado el 9 de octubre de 1967, convirtiéndose en un símbolo de lucha internacional, digna de un Guerrillero Heroico.

Entre estos dos héroes, existieron varios puntos en común: Un origen social acomodado y una educación familiar combinada con los estudios, además del contacto con el entorno rural que contribuyeron a la formación de un carácter y condición física, en ambos combatientes.

Los viajes por el continente americano, posibilitaron a ambos la estructuración de un sistema de pensamiento latinoamericanista que en el caso de Maceo se centra más en el contexto antillano, y en el Che Guevara trasciende al internacionalismo.

Ambas héroes, son dignos exponentes de la intransigencia revolucionaria, inmortalizadas a través de la expresión del Titán de Bronce durante la Protesta de Baraguá: “Guarde usted ese documento, que no queremos saber de él”, y un siglo después, cuando el Guerrillero Heroico expresó en un acto junto al pueblo: “Al imperialismo, ni un tantito así”. (Con información de Cubaminrex y Agencia Cubana de Noticias).