Por: Juan Carlos Naranjo
En el enfrentamiento a la COVID-19, el mar es nuestra trinchera y las armas los cordeles, esta aseveración de Orelvis Mursulí acompañó la donación que hicieran pescadores no estatales radicados en el puerto de Casilda a centros de la salud de Trinidad. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV) (V)
Ciento treinta y dos kilogramos de especies del primer grupo como pargo biajaiba y rubia, marcaron el gesto solidario nacido de la espontaneidad, según Eufemio Rodríguez administrador de la Base de pesca sureña.
“Los propios pescadores, viendo la situación actual , propusieron la donación y eso fue rápido, con muchos deseos, algunos cogen más que otros pero el 50 por ciento de estos aportaron, no hubo que exigirle a nadie, fue una cosa voluntaria“.
Ello lo confirman Orelvis Medinilla y René Miranda en nombre de los cerca de cuatrocientos hombres que como ellos se empeñan en servir desde aguas caribeñas.
“Como yo, muchos de aquí de la base de Casilda aportaron y si esto se extiende seguiremos dando el paso al frente”, expresa el primero de estos, mientras el segundo reafirma: “y aquí estamos, porque eso fue lo que nos enseñó el Comandante en Jefe.”
La Directora Municipal de Salud Pública en Trinidad, Doctora Silvia Odalis Beovides, calificó de valioso el aporte y dijo que tendrá como destinos el centro de aislamiento, la villa que acoge a las personas deambulantes, el Hospital General Doctor Tomás Carrera Galiano, el Hogar Materno de Trinidad y el Policlínico de Condado.
Esta es la tercera donación que realizan a Salud en las actuales circunstancias, pescadores del sector no estatal de Trinidad, las dos anteriores los asentados en playa La Boca y esta última los radicados en el puerto de Casilda.
