Héctor, en el reino de los sabores y colores

Hector combina sabores y colores

Héctor Morales, todo un experto en la coctelería inalcólica. Foto: Escambray.

Por: Ana Martha Panadés Rodríguez

Desde la cantina, Héctor Morales mezcla con absoluta precisión sabores, colores y mucha pasión por la coctelería, una profesión que descubrió tiempo después de llegar al bar del Hotel Costa Sur en el año 1982.

“Comencé como vendedor de bebidas, recuerda ahora; y fui enamorándome de ese mundo para incursionar en la investigación y la experimentación constantes; así me convertí en barman”.

Ahora en el bar La piscina del hotel Ancón, en Trinidad,  se le reconoce por su locuacidad y esa manía de no estar quieto, pendiente siempre al cliente que se acerca y se sorprende por los más diversos tonos que Héctor dibuja en una copa.

Entonces, se ajusta los lentes y habla de mezclas a partir de frutas cubanas, de su pericia en encontrar en lugares desconocidos de Cuba la manzana, la pera y el melocotón, para agregarlos a sus bebidas saludables, ecológicas. En otro ademán un poco más serio,  comienza toda una disertación sobre el genoma humano,  la coctelería alternativa o para la tercera edad.

Héctor también apuesta por la ciencia, fue de los primeros  en experimentar con sabores diversos: consomé de pescado, o el chocolate de Baracoa, “el más exquisito del mundo”, según su sapiencia. Y en este laboratorio de aromas y colores se probó además  como innovador;  todo un experto con tres participaciones en el Fórum Nacional de Ciencia y técnica y dos Congresos internacionales sobre Salud y Turismo.

A tan distinguido palmarés agregó recientemente el Premio Líder de la Calidad otorgado por el Ministerio del Turismo y el Sindicato de ese ramo; apenas un nuevo ingrediente que saborea desde su humildad.

Y no duda en confesar la fórmula de su éxito: “Es la empatía que debo tener con la persona que está sentada frente a mí, porque para hacer un buen cóctel se necesita estudio, mucha creatividad, pero también compromiso con el cliente.”