Por más de cinco décadas entre Cuba y Estados Unidos no existieron los vuelos comerciales directos. A pesar de la cercanía geográfica, la lejanía política mantenía los cielos incomunicados. El bloqueo impuesto por Washington funcionaba como la barrera más alta.
Pero esta etapa de acercamientos más simbólicos que fácticos parece subir un escalón palpable con la firma del Memorándum de Entendimiento sobre aviación civil entre el ministro de Transporte cubano, Adel Yzquierdo, y su par norteamericano, Anthony R. Foxx, que permitirá los viajes aéreos regulares entre ambos países a partir del próximo otoño.
El acuerdo se oficializó a la 11:00 de la mañana de hoy en el Salón Vedado del Hotel Nacional de Cuba, también con las rúbricas del embajador Charles H. Rivkin, secretario adjunto para Asuntos Económicos y Negocios del Departamento de Estado, y del presidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, Alfredo Cordero.
Con la firma del documento, se abre un plazo de quince días para que las aerolíneas estadounidenses presenten sus solicitudes al Departamento de Transporte para las rutas que les gustaría operar.
El pasado 17 de diciembre, aniversario del anuncio del restablecimiento de las relaciones entre Cuba y EE.UU., las partes anunciaron que habían logrado un entendimiento sobre aviación civil.
El acuerdo representa un potencial de 110 conexiones de ida y vuelta, con veinte vuelos diarios a La Habana y diez vuelos diarios a otros aeropuertos en la Isla.
El proceso de licitación se abre exclusivamente para aerolíneas estadounidenses, pues se excluye a la estatal Cubana de Aviación debido a litigios en EE.UU. que podrían llevar a que sus bienes fueran embargados si entran en territorio norteamericano, según explicó el pasado viernes el subsecretario de Estado adjunto para Asuntos de Transporte, Thomas Engle.
El funcionario estadounidense explicó que el Departamento de Transporte comenzará a adjudicar rutas lo antes posible, a más tardar en verano, de manera que los primeros pasajes se podrían comenzar a vender para el otoño.
El inicio de los vuelos regulares entre Cuba y EE.UU. facilitará los viajes para los estadounidenses que entren dentro de las doce categorías en las que se permiten las visitas a la Isla, donde todavía no pueden entrar como turistas.
(Tomado de Cubadebate)