En el capítulo habanero participaron delegaciones de 37 países, se presentaron más de tres mil novedades editoriales y se entregó a Rogelio Martínez Furé el Premio Nacional de Literatura
Tras 10 jornadas de actividad la XXV Feria Internacional del Libro de Cuba, el más masivo evento del país, llega a su fin en su fase capitalina para desplazarse por el resto de las provincias de la isla.
La última jornada de la Feria depara en su sede habitual de La Cabaña un esperado panel que responde al nombre de Tres narradores uruguayos del siglo XX, a propósito de homenajear al País invitado de honor, que en esta ocasión es la nación suramericana.
Dicha ponencia contará con la presentación de los libros Narraciones, de Felisberto Hernández; Juntacadáveres, de Juan Carlos Onetti, y Veinte cuentos, de Mario Arregui, todo un acontecimiento para los amantes de las letras en lengua hispana.
Además, trascendió que el panel contará con la participación de Mabel Hernández, Jorge Fornet, Teresa Melo y Susana Haug, siguiendo así la tradición de la cita literaria de ir más allá de la mera venta de libros e incentivar la creación y el análisis de los mismos.
No faltarán aquellos entusiasmados por alguna que otra rebaja sustancial de última hora de la amplia gama de artículos extra-literarios que han copado la feria desde que abriese sus puertas, el pasado 11 de febrero.
Pero a diferencia de eventos homólogos de otras latitudes, esta última jornada no se basa sólo en vaciar el recinto y sacar la mayor cantidad de dinero posible, sino que las actividades de debates y presentaciones seguirán a la orden del día, tales como el citado panel.
Por último, la gala oficial de clausura de la XXV Feria del Libro cubana tendrá lugar en la ya icónica Sala Nicolás Guillén -ubicada en la mencionada fortaleza militar sede de la cita- como justa despedida de un evento que durante un cuarto de siglo ha sabido establecerse en la mente de los cubanos como parte de cada familia.
En los 10 días de duración de la Feria, participaron delegaciones de 37 países, se presentaron más de tres mil novedades editoriales y se entregó al etnólogo Rogelio Martínez Furé el Premio Nacional de Literatura, máximo galardón del mundo de las letras en el país. (Tomado de Escambray Digital)