El presidente estadounidense, Donald Trump, partirá hoy de Canadá con destino a Singapur, donde el próximo martes sostendrá un histórico encuentro con el máximo líder de la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Kim Jong-un.
De acuerdo con la agenda difundida por la Casa Blanca, el mandatario republicano saldrá a las 10:35 hora local de Charlevoix, en la provincia de Quebec, tras llegar ayer para participar en la Cumbre del Grupo de los Siete (G7).
Con su retirada matutina, el gobernante se perderá parte de las discusiones de la cita, fundamentalmente las vinculadas con el cambio climático, un asunto en el cual Trump tiene profundas divergencias con el resto de los miembros, con quienes, además, difiere en materia comercial.
Al referirse este jueves a la venidera cumbre que sostendrá con Kim, Trump consideró que la reunión será muy fructífera e insistió en el tema de la desnuclearización de la RPDC.
‘Ellos (los norcoreanos) tienen que destruir (sus armas), si no se desnuclearizan, eso no sería aceptable, no podríamos suspender las sanciones’, advirtió Trump con su retórica habitual de presiones al recibir el jueves en la Casa Blanca al primer ministro japonés, Shinzo Abe.
Luego, en una conferencia de prensa, el secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, subrayó en un tono similar que su país quiere pasos concretos y no solo palabras de parte de la RPDC.
Pompeo habló de ‘progresos’ antes del encuentro del 12 de junio en el Hotel Capella de la isla de Sentosa, Singapur, y sostuvo que Kim le indicó personalmente estar ‘preparado para la desnuclearización’.
Washington y Pyongyang sorprendieron al mundo en marzo pasado cuando anunciaron la disposición de celebrar ese histórico encuentro entre sus líderes, luego de meses de altas tensiones y ataques verbales.
Desde entonces el camino que ha conducido hasta la cita del próximo martes estuvo marcado por algunos tropiezos y diferencias que llevaron a Trump a anunciar la suspensión de la cumbre, pero el 1 de junio el republicano confirmó que tendría lugar en la fecha y lugar previstos.
Ese día, tras recibir en la Casa Blanca a Kim Yong-chol, vicepresidente del Comité Central del Partido del Trabajo de Corea, el mandatario estadounidense sostuvo que la reunión en Singapur podría ser la primera de varias para realizar negociaciones bilaterales.
La nación asiática ha enfrentado años de aislamiento y sanciones económicas por sus programas nucleares y de misiles, que ese país califica de defensivos y disuasivos ante las amenazas de Estados Unidos y sus aliados.
A finales de mayo el territorio oriental desmanteló -como había prometido- su centro de pruebas nucleares de Punggye-ri, en un gesto de buena voluntad dentro de una la ofensiva diplomática a favor de la paz que la RPDC emprendió desde inicios de año.
(Tomado de Prensa Latina)