El Comandante de la Revolución Ramiro Valdés, integrante del Buró Político del Partido Comunista de Cuba y Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, examinó en la Isla de la Juventud el avance del Programa de Desarrollo Integral.
Conoció in situ los avances que experimenta la mayoría de las actividades, excepto el sector del turismo, con saldos negativos hace un lustro en todos sus indicadores económicos.
Al evaluar el resto de los renglones, el Héroe de la República de Cuba conoció que al cierre de julio el plan territorial de inversiones se ejecuta al 80 por ciento, afectado por roturas continuas del molino para la producción de áridos e inestabilidad de la transportación marítima de carga, única vía por donde llegan al territorio todos los recursos para su sostenibilidad y desarrollo.
En relación con el programa de edificación de viviendas, llamó a trabajar según lo establecido en la política, lograr un movimiento popular para compulsarlo, enfatizó en la necesidad de diversificar la producción de materiales de la construcción e insistió en la pertinencia de adoptar medidas de ahorro de agua, sobre todo en sectores como la salud y el turismo.
Calificó de bochornosa la impunidad en el consumo de los hidrocarburos, situación que debe arrostrarse con control y análisis político-administrativos para romper la cadena delictiva, al tiempo que indicó cerrar filas a las más de 500 ilegalidades, identificadas por la Dirección de Planificación Física.
También fue informado de la estrategia que asumirá el sector de la agricultura para vencer los atrasos en sus planes, garantizar el consumo de viandas, hortalizas y granos a la población, a partir del autobastecimiento territorial que presupone un balance dietético de 30 libras de esos productos en el mes.
Antes de la sesión de trabajo, el Comandante de la Revolución visitó la primera de una treintena de fincas forestales y el vivero de cítricos, donde en nueve casas de cultivo se desarrolla el futuro del programa, que durante varias décadas identificó a la segunda isla cubana.
Tomás Betancourt, director de la empresa agroindustrial explicó que cada casa de cultivo cuenta con riego fertilizado, tiene capacidad para unas 30 mil posturas certificadas de toronja, naranja y lima persa, suficientes para plantar 50 hectáreas del agrio hasta cumplir el plan de dos mil hectáreas.
(Tomado de Cubadebate)