Por: Ana Martha Panadés Rodríguez.
Los encantos de Trinidad como destino turístico, destacados por varias personalidades de recorrido por la ciudad, respaldan el amplio programa inversionista diseñado por el Ministerio de Turismo (MINTUR) como parte del Plan de Desarrollo Económico y Social hasta 2030.
Entre las obras a concluir figuran los hoteles Palacio Iznaga y La Popa, con 90 habitaciones. Se encuentran en fase de terminación dos haciendas en el Valle de los Ingenios, que tendrán 7 capacidades de alojamiento, y ya se inició el hotel Meliá Trinidad, que contará con 400 habitaciones, situado en la península de Ancón.
A mediados de junio pasado se comenzaron otras 500 habitaciones también en la zona de playa y se ultiman detalles para iniciar la ampliación del Iberostar Grand Hotel Trinidad, hasta hoy el único cinco estrellas de la provincia.
Con respecto al desarrollo de la rama náutica, el delegado del MINTUR en el territorio, Reinier Rendón, declaró a la prensa, que se prevé ampliar la Marina Marlin a 200 atraques, así como la creación de otras, una concebida en la zona de La Boca y otra en el puerto de Casilda, donde el Ministerio del Transporte de Cuba hará importantes inversiones a fin de modernizar la terminal de cruceros.
Las mejoras en la infraestructura hotelera se acompañan de nuevos servicios en la red extrahotelera, entre ellos destacan cafeterías y alrededor de 18 restaurantes como El Jigüe, una franquicia de la Bodeguita del Medio, otra de El Floridita y más reciente la Factoría Santa Ana.
Hoy las instalaciones de Palmares en la central provincia cubana de Sancti Spíritus, y esencialmente en Trinidad, tienen espacios en el mercado y crecen alrededor de 200 mil turistas todos los años.