Continúan bajos niveles de agua en embalses de Sancti Spíritus

Apenas 444 millones de metros cúbicos de agua, el 37 por ciento de su capacidad normal operacional, acumulan los nueve embalses de la provincia de Sancti Spíritus, aunque los que abastecen a la población mantienen una situación favorable.

Betsy Arteaga Betancourt, especialista en la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico Sancti Spíritus, dijo que en el presente junio, el segundo mes de más precipitaciones del llamado período húmedo (mayo-octubre), las lluvias no han sido capaces de alimentar las presas del territorio.

Afortunadamente, agregó Arteaga Betancourt, los embalses de Tuinucú, Siguaney y Lebrige (que abastecen a la población) se mantienen casi al 75 por ciento de su capacidad máxima.

La presa Zaza, el mayor acuatorio de Cuba, solo aloja el 28 por ciento de los 920 millones de metros cúbicos que puede acumular en correspondencia con su prevención hidrológica, aunque ella está diseñada para soportar mil 020 millones de metros cúbicos del líquido.

Fue en el 2012 cuando llegó a almacenar el 104 por ciento de su capacidad y alivió durante cinco meses de ese año mil 471 millones de metros cúbicos de agua, casi una y media veces su volumen operacional; en ese período evacuó de forma intermitente por su aliviadero en 65 ocasiones.

Las lluvias de mayo de ese año provocaron el más espectacular llenado que se recuerde, al acopiar 800 millones de metros cúbicos en apenas 48 horas.

Desde que se explota la presa Zaza en 1972, esta ha rebasado los mil millones de metros cúbicos del líquido en 11 ocasiones, incluidas dos en el 2012 (en mayo y octubre), según registro de la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos; la primera vez que sobrepasó esa cantidad fue el 18 de octubre de 1978.

Aseguran los expertos que la Zaza puede soportar una capacidad extraordinaria de mil 400 millones de metros cúbicos, aunque se ha determinado por las autoridades competentes dejarla en 920 millones de capacidad operacional, para evitar riesgo de inundaciones aguas bajo, si tuviese que aliviar.

Esta última cifra garantiza, en un período de sequía normal, que pueda suministrar el líquido requerido a las actividades agropecuarias en gran parte del territorio sureño espirituano, principalmente para la cosecha arrocera.

Aunque nunca la represa ha estado en la categoría de volumen muerto (90 millones de metros cúbicos), en medio de la intensa sequía de 1976, el cuatro de mayo, descendió a 99,6 millones, considerado su nivel histórico más bajo. (Agencia Cubana de Noticias)