Por: Belkis Niebla López
Muchas son las muestras de entrega y dedicación que por estos días de contingencia sanitaria protagonizan y protagonizarán los trabajadores trinitarios esos que por las características de su labor no pueden quedarse en casa. Desde que los primeros casos de la COVID-19 fueran detectados en este municipio de Trinidad, comenzaron también las diferentes historias en cada uno de los sectores. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV)
En primer lugar los médicos, enfermeros, enfermeras y su personal de apoyo , gracias a ellos es que Trinidad lleva más de 45 días sin casos confirmados de la enfermedad, ellos no tienen hora para concluir cada jornada porque saben bien el significado de su labor.
Junto a ellos son muchos los trabajadores que deben continuar sus labores para poder garantizar la estabilidad en la crisis. Entre los que se encuentran los del sector del Comercio y la Gastronomía que son los encargados de la venta y comercialización de productos de primera necesidad como los de alimentos y aseo.
También los transportistas que tienen la responsabilidad de trasladar el personal imprescindible hacia los cetros distantes y porque de igual forma es necesario llevar pruebas y materiales de Salud Pública, muchos choferes siguen manejando.
Y qué decir de los encargados de en tiempos difíciles de coronavirus garantizar la tranquilidad ciudadana, los policías deben salir a las calles día a día porque todos necesitamos protección y seguridad, porque el cumplimiento estricto de la ley y las disposiciones circunstanciales es vital.
De igual forma es importante la labor de quienes tienen a su cargo la recogida de los desechos sólidos, de quienes se desempeñan en los servicios necrológicos, los que producen la electricidad y los que se ocupan del mantenimiento de las líneas eléctricas o telefónicas, así como los trabajadores de Acueducto encargados de mantener estable el abasto de agua a la población.
Por ellos, por nosotros, por todos, la mejor manera de reconocer ese aporte indispensable es cumplir con el más elemental deber ciudadano ahora mismo: protegerse y proteger a los demás. El distanciamiento social no debe ser asumido como una opción. Es una responsabilidad, quédese en casa, es su deber, otros cumplen el suyo sin esperar reconocimientos, porque el país lo precisa.