
Roberto Mitchell, ciudadano de Vancouver, Canadá quien en Trinidad se ha mantenido a distancia para cumplir el aislamiento social, elogia la meritoria labor del presidente cubano Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, quien se desvela los siete días de la semana por el bienestar de su pueblo. CUBA ANTE LA COVID-19 (I) (II) (III) (IV)
El amigo de la patria martiana-fidelista asegura que como ningún otro mandatario en el mundo Díaz-Canel, sin descanso, se entrega en cuerpo y alma para salvar al país de la tenebrosa pandemia causante de la perdida de la vida de miles de personas en el orbe.

Mitchell conoce esta isla caribeña desde hace mucho. La ha visitado por más de veinte años acompañado de su esposa Betty. Con ella regresa una y otra vez para instalarse a Trinidad y disfrutar de su visa familiar en la vivienda de Annia Torres León, donde se suma a los aplausos de esperanza por la salud y la vida.
En casa durante estos meses de lucha contra la COVID-19, en uso de sus habilidades de aficionado a la artes plásticas junto a su sentido imaginativo, creó con elementos de chatarra figuras sobre la cotidianidad, la recreación, la culinaria, la religión, la flora y fauna, las cuales en su próxima visita a la villa en enero de 2021 espera exhibir a los sureños en una galería.

Además el canadiense es admirador de la comida criolla, de la música que interpreta Benny Moré, del equipo de beisbol, de los gallos espirituanos y de la radio cubana. Cuando está de visita en la urbe frecuenta lugares emblemáticos testigos del amor, del cariño y de la hospitalidad propia de los trinitarios.

