Museo de la Lucha Contra Bandidos de Trinidad: 36 años acuñando historia

Las salas del Museo Nacional de la LCB de Trinidad tienen siempre visitantes deseosos de conocer sobre esta importante etapa de la historia de Cuba. Foto: Escambray.

Por: Juan Carlos Naranjo

36 años han transcurrido desde que el comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque inaugurara el Museo Nacional de la Lucha Contra Bandidos: la institución trinitaria, única con esa temática en la isla testifica para Cuba y el mundo una de las epopeyas más trascendentales del pueblo cubano.

Por eso desde su apertura el primero de junio de 1984, ha sido constante la presencia de visitantes nacionales y extranjeros atraídos por los testimonios de la  lucha contra los enemigos de la naciente Revolución, en las montañas del Escambray.

Y es que cuatro etapas del bandidismo que da tan de 1959 a 1965, son recreadas en sus seis salas a través de mapas, documentos, objetos, armas y una galería de fotos de mártires, incluidos niños y adolescentes, asesinados por los mercenarios.

Ahora está cerrado al público el otrora Convento de San Francisco de Asís y constructores de la Cooperativa no Agropecuaria EVACUBA del Fondo Cubano de Bienes Culturales se dedican a su pintura como culminación de un proceso restaurador.

Museo Nacional de la Lucha Contra Bandidos (LCB). Foto: José Rafael Gómez Reguera.

Ello incluyó el mantenimiento a la cubierta y terrazas, selladas con rasilla para evitar filtraciones, por primera vez se hicieron adaptaciones para que el agua de lluvia fluyera hacia la calle y fue enrejado el almacén que atesora las piezas de la instalación.

La directora Yara Aróstica, dijo que los especialistas laboran en los guiones para llevar a cabo un nuevo montaje museográfico y museológico a tono con las tendencias actuales.

El Museo Nacional de la LCB de Trinidad recibió en el 2018 la Réplica del Machete del Generalísimo Máximo Gómez Báez que entrega el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, ostenta la Condición de Colectivo Vanguardia Nacional por 10 años consecutivos y el Sello 8 de octubre otorgado por la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores.

A la institución se anexan la casa-museo de Alberto Delgado en la finca Masinicú y la del campesino Pedro Lantigua Ortega, situada en la zona montañosa de Limones Cantero.