Softbolista trinitaria en nómina del Cuba

La softbolista trinitaria Martha Esther Torres Palenzuela, principal figura de este deporte en la provincia.

Por: Joaquín Gómez Serra

 El softbol femenino de Sancti Spíritus está de plácemes. Por primera vez en los últimos años tres muchachas del deporte de la bola blanda integran la preselección cubana de cara a venideros compromisos internacionales. Son ellas, la consagrada trinitaria Martha Esther Torres Valenzuela, y las noveles Ana Amalia González y la talentosa Osmaidi Fonseca.

Este llamado a la pre cubana de estas tres jugadoras que iniciarán los entrenamientos en septiembre en la Escuela Superior de Formación de Atletas de Alto Rendimiento Giraldo Córdova Cardín, situada al este de la Habana, marcan el antes y el después del softbol femenino de Sancti Spíritus.

Muchas glorias dieron antaño el softbol por estos lares. Y remitiéndonos a tiempos de lujo hay que mencionar a la estelar María Zamora, la atleta espirituana de mayores resultados en la arena internacional, en una pléyade de jugadoras que, por entonces, tenía también a jugadoras estelares como María Valdés, Hilda Harry, Esther Jiménez y Clara Cuéllar, por sólo mencionar algunas.

María Zamora atesora atesora una rica historia de 10 años ligada al atletismo y otros 14 al softbol, trayectoria en que logró la proeza de coronarse en ambas disciplinas a nivel centrocaribeño.

Lo hizo como integrante del relevo 4×100 en la cita de Santiago de los Caballeros 1986, y luego como parte de los equipos de la bola blanda en México 1990 y Ponce 1993.

También participó en dos campeonatos mundiales, en los Juegos Panamericanos de La Habana 1991 y en los Olímpicos de Sídney 2000. Estos últimos marcaron la cumbre de su carrera. Nada como los días disfrutados en la isla-continente, al saberse parte de la justa en que todo deportista añora participar.

Sus sucesoras le siguen los pasos. Con sólo 24 años, Martha ya acumula una experiencia en este deporte de 12 años, disciplina a la que fue captada en el séptimo grado para integrar las filas de la Escuela de Iniciación Deportiva Lino Salabarría Pupo.

Allí en la alta escuela, donde se forja el relevo del mañana del deporte yayabero, Martha tuvo como primeros entrenadores a Luis
Ernesto Hung, Tomás Valera y José Luís Quintero, y más tarde, le vertieron la sabia de sus conocimientos el internacional Rolando Alvarez, así como José Luis Hernández.

Corría mayo del 2013, y la trinitaria Torres Palenzuela comenzaba a escribir historia en este deporte. Fiel a la tradición y arraigo del softbol en Sancti Spíritus, el equipo juvenil de la rama femenina se coronó campeón nacional en el contexto de las olimpiadas de esa categoría, con sede en Granma.

El triunfo de las muchachas resultó contundente si tenemos en cuenta, sobre todo, que el certamen reunió a elencos de nueve provincias.

Las espirituanas ganaron siete de los ocho encuentros, avaladas por excelente pitcheo colectivo que compiló para un extraordinario 1.48 PCL, bateo de 260 y defensa de 975.

Martha aportará a esta preselección experiencia, buena defensa en el cuadro y excelente bateo.

Dentro del aporte individual de las muchachas, dirigidas por el experimentado Rolando Álvarez Poll, sobresalieron las actuaciones de la lanzadora trinitaria Martha Esther Torres Palenzuela, quien ganó más de la mitad de los juegos (cuatro) y lanzó para 1.09 PCL, con 32 ponches, líder del torneo.

De entonces para acá Martha comenzó a escribir con ribetes dorado su historia. Participó en todos los campeonatos nacionales en las diferentes categorías escolares y juveniles, y por el descenso que comenzó a tener este deporte en la provincia en los años 80, donde nunca más se pudo integrar un equipo pleno de la provincia, se desempeña, indistintamente como refuerzo de Villa Clara y Granma en la primera categoría.

En su mente están nítidos los recuerdos de su último año en la categoría juvenil, etapa en la que es llamada al equipo como refuerzo de las naranjas de Villa Clara, defendiendo ya el segundo cojín.

En 2013, y con sólo 17 años tiene su primera prueba de fuego, al vestir las franelas del Cuba. Doce meses después Martha es llamada a las filas del CEAR Giraldo Córdova Cardín de la capital cubana, y posteriormente participa en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz, México, en los Panamericanos de Toronto, Canadá 2015, así como en el Campeonato del Mundo de la disciplina en la propia tierra canadiense.

Después de varios años sola en las preselecciones nacionales de softbol la trinitaria recibe la compañía en la nómina de dos baluartes que están llamados a defender los colores patrios durante muchos años. Ana Amalia González ya enseñó su calidad desde el box en el campeonato nacional al titularse campeona defendiendo el uniforme de Villa Clara, certamen donde ganó dos juegos, y promedió 3.73 pcl.

Por su parte, la receptora taguasquense Osmaidi Fonseca, aún en edad juvenil, con sólo 16 años, ya jugó la primera categoría como parte del equipo La Habana, sexta en el nacional de la bola blanda.

Una buena nueva para ese talentoso y aguerrido cuerpo de entrenadores del softbol femenino de Sancti Spíritus, y que son fruto del trabajo de los entrenadores de la EIDE Lino Salabarría, por sólo mencionar algunos, Rolando Alvarez Poll, Luis Ernesto Hung y Fernando Cancio; ellos y muchos otros hacen que estos talentos se conviertan en realidad.