COVID-19 en Trinidad de Cuba: Se encienden las alarmas

Foto: José Rafael Gómez Reguera

Por: José Rafael Gómez Reguera

Nuevamente se encienden las alarmas en el municipio de Trinidad. El reporte de ocho casos positivos de la COVID-19 en una sola jornada, al cierre de este domingo 28 de febrero de 2021 es de lo que más se comenta en predios de la Ciudad Museo del Caribe y un poco más allá. Crece la preocupación ante un enemigo invisible, peligroso, altamente contagioso que no da tregua.

Son razones de peso para mantenernos alertas luego de dos meses en los cuales se reportaron numerosos casos en este territorio del centro sur de Cuba, sobre todo en febrero, situación que tensa el ambiente, aun cuando las principales actividades socioeconómicas, con ciertas restricciones, se mantienen.

De acuerdo con la información proporcionada por el sitio del Gobierno municipal en la red social Facebook, los casos contenidos en el parte oficial del MINSAP con cierre a las 12 de la noche de este domingo, seis (6)contactos de casos confirmados y dos (2)sin fuente de infección precisada, son los siguientes:

  • Paciente de sexo femenino de 29 años de edad, residente en Reparto Plaza perteneciente al Consejo Armando Mestre.
  • Paciente de sexo femenino de 29 años de edad, residente Reparto Plaza perteneciente al Consejo Armando Mestre.
  • Paciente de sexo femenino de 56 años de edad, residente en la Calle Simón Bolívar perteneciente al Consejo Popular Centro.
  • Paciente de sexo femenino de 35 años de edad, residente en Calle José Mendoza (Chanzoneta) perteneciente al Consejo Popular Armando Mestre.
  • Paciente de sexo femenino de 21 años de edad, residente en Calle Diego Velázquez perteneciente al Consejo Popular Casilda.
  • Paciente de sexo masculino de 17 años de edad, residente en Calle Diego Velázquez perteneciente al Consejo Popular Casilda.
  • Paciente de sexo masculino de 50 años de edad, residente en Calle Jesús Betancourt perteneciente al Consejo Centro.
  • Paciente de sexo masculino de 24 años de edad, residente en Calle Jesús Betancourt perteneciente al Consejo Centro.

A escasos días de cumplirse el primer año de la detección de los primeros casos del SARS-CoV-2 en Cuba, precisamente encontrados en Trinidad, las autoridades locales alertan sobre el crecimiento de los contagios y la existencia de no pocas indisciplinas sociales que conspiran contra la contención de la pandemia.

Jornadas de higienización y limpieza no son suficientes para detener este coronavirus. Y tal parece que algunos se creen inmunes a juzgar por el comportamiento ciudadano en espacios públicos, con el mal uso del nasobuco o con él colocado en la barbilla, mientras se come, fuma y conversa con amigos y conocidos, y hasta se permiten juegos pasivos en algunas calles poco transitadas y dadas, por consiguiente, a ese tradicional vínculo afectivo entre vecinos, pero extremadamente peligroso en las actuales circunstancias.