
Por: Oscar Alfonso Sosa
El vapor lo inunda todo. Se siente el hervir en los tachos. El olor a tomate cocinado copa el escenario. La pequeña fábrica Lucumí, de la Unidad Empresarial de Base Conserva y otras, de la Empresa Alimentaria de Sancti Spíritus, vive hoy la zafra del tomate.

La producción de puré a granel y envasado en galones de 5.5 kilogramos y botellas de 330 (las tradicionales de cerveza), comenzó, en buen cubano, con el pie derecho, por la estabilidad, hasta ahora, del suministro de la materia prima desde varias cooperativas campesinas.

Los centros vinculados a la COVID-19 son destinatario prioritario de esas producciones, que también se comercializan a otras entidades.

De sostenerse la estabilidad en el suministro de tomate, la pequeña fábrica Lucumí puede sumar aportes considerables de conservas, un elemento favorable para todos, y más, en los momentos actuales.

(Tomado de Radio Sancti Spíritus).