Por: Ana Martha Panadés Rodríguez
El programa inversionista del sector del turismo en el polo Trinidad- Sancti Spíritus sortea no pocos obstáculos para lograr el avance de las obras en ejecución, las cuales han debido reajustar sus cronogramas a causa de los atrasos provocados por el impacto de la emergencia sanitaria global y la drástica reducción de entrada de suministros al país.
Al evaluar la implementación de la Tarea Ordenamiento en esta actividad, el delegado del Ministerio de Turismo, (MINTUR) en la provincia, Reinier Rendón, precisó que alrededor de 815 millones de pesos sustentan las acciones de ampliación, mantenimiento y mejoras de la infraestructura hotelera y extrahotelera en el territorio.
En el caso del hotel Melia Trinidad -la obra turística más importante en construcción en Sancti Spíritus y localizada en la Península de Ancón- posee alrededor del 62 % de su presupuesto ejecutado, con los mayores atrasos concentrados en la etapa de acabado, y una nueva fecha pactada para su terminación, en junio del 2022.
Por su parte, en el Iberostar Ancón se paralizaron las labores hasta concretar un nuevo inversionista y en esa misma situación se encuentra el Palacio Iznaga, la inversión turística que arrastra los peores saldos en el territorio con demoras en su ejecución y problemas de calidad, que muestran asimismo la falta de seguimiento y control por parte de directivos de ese sector.
De acuerdo con el delegado del MINTUR en Sancti Spíritus en toda esta etapa en que la operación turística debió detenerse a causa de la COVID-19 se lograron recuperar más de 170 habitaciones fuera de orden en las cuales se realizaron diversas acciones constructivas a fin de elevar su confort, además de otras labores en el resto de las áreas de servicio, así como la modernización de tecnología y equipamiento.