El 31 de agosto de 1958 partió de la Sierra Maestra rumbo al centro de la isla la Columna número 8 ¨Ciro Redondo¨ comandada por Camilo Cienfuegos con la misión dada por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz de ser la principal fuerza guerrillera en el sur y centro de Las Villas
Por: Rafael Novoa Pupo
La Columna número 8 “Ciro Redondo”, al mando del comandante Ernesto Che Guevara, partió hace 63 años el 31 de agosto de 1958 de la Sierra Maestra, rumbo al centro de la isla, con la misión del Comandante en Jefe Fidel Castro de ser la principal fuerza guerrillera en el Sur, y Centro de Las Villas.
Esta columna fue fundada el 24 de mayo de 1958, y junto a la columna 2 “Antonio Maceo”, al mando del comandante Camilo Cienfuegos formaban parte de la contraofensiva estratégica para llevar la guerra revolucionaria al centro y occidente de la Isla, una vez derrotada la ofensiva batistiana en Oriente.
La columna del Che estaba integrada en su etapa inicial por 140 combatientes, cuando partieron desde las Mercedes, en la Sierra Maestra, y en ella estaban representadas todas las provincias del país, en mayor porcentaje la de Oriente.
Fue así que partieron a las 4:20 de la tarde del día 31 de agosto, y durante la trayectoria debieron soportar las inclemencias de la naturaleza, torrenciales aguaceros y caminos lodosos, provocando lesiones en los pies y agotamiento. No obstante, los rebeldes mantuvieron la disciplina y no descuidaron las medidas de seguridad tales como postas y emboscadas, alejadas del campamento.
El 9 de septiembre la columna llega a la Federal, donde cayeron en una emboscada. El 14 de septiembre chocan con una posta enemiga en la zona de Cuatro Compañeros, y se entabla un prolongado combate que les ocasiona un muerto y varios heridos. Días después el 29 de septiembre, llegan a las tierras del central Baraguá, y pasan la Trocha de Júcaro a Morón, para luego cruzar a nado el río Jatibonico en la noche del 11 de octubre.
La marcha hasta Las Villas fue muy difícil. El enemigo los perseguía encarnizadamente y la tropa rebelde tuvo que emplear la mayor astucia, inteligencia y valentía para vencer a los miles de soldados, y aviones de la tiranía.
Después de 45 días, los bravos guerrilleros conducidos por el Che, llegaron a Las Villas. Habían cumplido la primera parte de la orden del Comandante en Jefe.
El encuentro con Camilo Cienfuegos, quien había partido unos días antes desde El Salto en la Sierra Maestra el 21 de agosto, se produce en Sagua La Grande. Al llegar a esta zona las dos columnas se encontraron con varios grupos guerrilleros, uno dirigido por el Movimiento 26 de Julio, otro por el Directorio Revolucionario, y un tercero llamado Segundo Frente del Escambray, dirigido por Eloy Gutiérrez Menoyo, quien abusaba de los campesinos y les robaba su ganado y cosecha. Al triunfo del 1 de enero de 1959 y en desacuerdo con el proceso revolucionario cubano, Gutiérrez Menoyo abandonó el país y se refugió en Estados Unidos desde donde siguió conspirando contra la Revolución Cubana. Finalmente, había otro grupo dirigido por Félix Torres, quien colaboró rápidamente con los rebeldes.
Lo más apremiante era lograr la unidad de todas estas fuerzas que operaban con mandos diferentes en una misma zona. Ante esta compleja situación Camilo y Che hicieron valer su autoridad y respeto a los principios, y para lograr la unidad revolucionaria exigieron la subordinación de los distintos grupos al mando rebelde. La situación más difícil se presentó con el Segundo Frente Nacional del Escambray, el cual intentó infructuosamente prohibirles a las tropas del Che subir a su zona sin antes explicar a qué iban.
Camilo y Che, siguiendo las orientaciones de Fidel, lograron la unidad con los demás destacamentos guerrilleros bajo la dirección del M-26-7. El 1 de diciembre de 1958 se estableció el Pacto del Pedrero entre el M-26-7 y el Directorio Revolucionario, donde coincidieron en que Unir era la palabra de orden, y que juntos estaban dispuestos a vencer o a morir.
Ambas columnas guerrilleras, siguieron sus objetivos estratégicos, y es cuando Camilo ataca el cuartel de Yaguajay donde se habían hecho fuerte las tropas enemigas, por lo cual se requirieron nueve días de batalla, para tomar el poblado.
Esta victoria coincidió con la toma de la ciudad de Santa Clara por las tropas del Che, el principal bastión gubernamental en el centro del país, y que fue posible por la acertada dirección, correcta apreciación y el mando de su jefe, así como la férrea voluntad, disciplina, y estoicismo de sus combatientes.
Ambas victorias rebeldes, coincidieron con la fuga del tirano y su consecuente intento de un golpe de estado. Seguidamente Camilo y Che reciben órdenes de avanzar hacia La Habana para consolidar el triunfo, y tomar todas las fortalezas militares de la tiranía. Camilo toma Columbia, y el Che La Cabaña, en tanto Fidel avanza hacia la capital de la República, para comenzar las transformaciones sociales, de la Revolución. (Con información de Contraloría General de la República y Ecured).