Trinitarias en la gestión de gobierno, una fuerza indetenible

En los 45 años de los órganos del poder Popular, la presencia de mujeres que se desempeñan como delegadas constituye expresión genuina de una gestión de gobierno participativa y democrática

La campaña de vacunación, una de las tareas que con entusiasmo asume la delegada Rebeca Medina Jiménez (a la derecha)

Por: Ana Martha Panadés Rodríguez

Como expresión del empoderamiento femenino, significativa resulta la presencia de la mujer en las estructuras de gobierno. En el municipio espirituano de Trinidad 37 compañeras multiplican sus días –y hasta sus horas- como delegadas de los órganos del Poder Popular y lo hacen con una entrega sin límites.

En estos 45 años, el desempeño de los delegados y delegadas sostiene el continuo perfeccionamiento del sistema de órganos que ha dado al pueblo el derecho de ejercer el verdadero poder y aportar a la solución de los problemas desde la participación colectiva.

Con más de dos décadas en esa responsabilidad, Rebeca Medina Jiménez, Minerva Beltrán Ramonet y Osnedy Valmaceda Medina cultivan el arte de escuchar todo tipo de reclamos en la comunidad y llevarlos hasta la instancia gubernamental y de paso tocar a las puertas de directivos y funcionarios que han aprendido a valorar su rol como delegadas y la confianza que depositan en ellas los electores.

En el Consejo Popular Monumento –con todas sus complejidades- Rebeca es una líder natural; tan menuda y con tantas responsabilidades a cuestas: delegada de la circunscripción 48, miembro del comité municipal de la Federación de Mujeres Cubanas, representante del Programa Educa a tu hijo y presidenta de la Comisión de educación, cultura y deporte de la Asamblea Municipal; con tanta vitalidad, además.

De su estreno en la gestión gubernamental recuerda la problemática social en el “callejón del estrecho”, un área con viviendas en su mayoría en mal estado y familias vulnerables. Con el apoyo de la Oficina del Conservador de la Ciudad y el Valle de los Ingenios convocó al pueblo para lograr un cambio total en el vecindario. Fue el inicio de una relación armónica que hasta hoy mantiene con los 920 electores de mi circunscripción.”

“Desde ese momento considero el trabajo comunitario integrado esencial en nuestra labor –dice con la autoridad de no darle la espalda a ningún problema por peliagudo que resulte-. No me gustan las mentiras; cuando la solución no está en nuestras manos, explico los argumentos y con la verdad convenzo a cualquiera”.

Osnedy Valmaceda Medina conoce muy bien las siete circunscripciones que dirige como presidenta del Consejo Popular La Purísima. Encima de una carreta o en un motor encuentra tiempo para visitar a sus electores en Sanguly, La Pastora o El Lampiño por muy distante que se encuentran estas comunidades.

Osnedy Valmaceda, presidenta del Consejo Popular La Purísima reconoce entre los mayores desafíos de la última etapa la batalla contra la covid

La también delegada de la circunscripción 11 desde hace 26 años trabaja de manera muy estrecha con la Comisión de Prevención y el Ministerio del Interior en función de revertir una problemática que le quita el sueño, el embarazo en la adolescencia, aunque tampoco le pierde pie ni pisada a la inversión hidráulica que ya mejora el abasto de agua en esa zona pese a los atrasos de las labores.

Osnedy se reconoce parte del proyecto de gobierno democrático a lo largo de estos 45 años. “Yo he servido al pueblo de manera incondicional y me llena de orgullo que me sientan como líder y que he sido capaz en todo este tiempo de impulsar varias tareas; otras han debido aplazarse por la pandemia, pero no renunciamos a ninguna.”

El alumbrado público y el mal estado de las calles figuran entre los reclamos a los que Minerva Beltrán Ramonet no ha podido darles solución como presidenta del Consejo Popular Centro, cargo que desempeña desde hace 17 años; y aunque al comienzo la agobiaron tantas responsabilidades, hoy- confiesa- organiza su agenda al punto de disponer de tiempo incluso para compartir con la familia.

De cara al proceso de rendición de cuenta a iniciarse el próximo 15 de noviembre Minerva Beltrán considera que constituirá – pese al contexto económico desfavorable- un momento de recuento de cuánto se trabajó a nivel comunitario en el enfrentamiento a la covid, el acompañamiento a los médicos y enfermeros de la Atención Primaria, la visita a los enfermos, el proceso vacunatorio, entre otras tareas.

Sensibles, incansables y optimistas, estas trinitarias enaltecen el lugar que la mujer ha conquistado dentro de la Revolución. Sus historias de vida se cuentan desde lo cotidiano, en el barrio, con un sentimiento colectivo y participación genuina.

Minerva Beltrán, la presidenta del Consejo Popular Centro ha acompañado a sus electores en el enfrentamiento a la pandemia