En la etapa crece la llegada de viajeros a la provincia como resultado del esfuerzo por potenciar un sector clave en la recuperación de la economía cubana
Por: Ana Martha Panadés
La actividad turística en la provincia de Sancti Spíritus se consolida como uno de los sectores más dinamizadores de la economía en la provincia durante el año 2022; lo evidencia el crecimiento sostenido en el arribo de visitantes, así como la discreta recuperación de los ingresos y de otros indicadores de eficiencia.
Tales resultados, en opinión de Yordanis Fernández Alonso, delegado del Ministerio del Turismo (Mintur) en el territorio espirituano, se consideran favorables al evaluar las cifras con cierre de noviembre, etapa en la cual se recibieron más de 223 700 clientes en las instalaciones que prestan servicio de alojamiento por estos predios. Los 74 631 vacacionistas extranjeros representan el 91.8 por ciento de cumplimiento del compromiso previsto.
Si bien estos indicadores distan de los alcanzados en la última década, el número de viajeros supera los registros entre 2019 y 2021, cuando se contabilizaron las tasas más bajas del sector como resultado directo de las medidas impuestas durante el gobierno de Donald Trump y del azote de la COVID-19 que impacto en particular a la denominada industria del ocio.
De acuerdo con el directivo, a los principales emisores de turísticas, entre ellos Canadá, Francia, Alemania, se suman otros mercados europeos, como España y Polonia, con un crecimiento sostenido en la última etapa, a lo que ha contribuido además la estrategia de promoción y comercialización desplegada por el Mintur con turoperadores y agencias de viajes en aras de resaltar los atractivos de este destino turístico.
“En la etapa se ha trabajado en la mejora de la planta hotelera y extrahotelera, el diseño de nuevos productos y servicios y la capacitación de los recursos humanos, al tiempo que se logra concretar encadenamientos con los diferentes actores económicos para garantizar la presencia de ofertas con sello nacional”, agregó Fernández Alonso.
El proceso inversionista tampoco se detiene pese a las limitaciones de insumos y materias primas; de esta manera avanzan los trabajos en dos de los hoteles emplazados en la península de Ancón que han beneficiado áreas como la recepción y los restaurantes. En el caso del Village Costasur, su reapertura está prevista para este mes de enero, mientras el Meliá Trinidad se adentra en la fase de terminación.
El polo espirituano cuenta con alrededor de 2 000 habitaciones en instalaciones turísticas y casas de arrendamiento que de manera paulatina recuperan sus niveles de operación turística en coincidencia con la temporada alta —comprendida entre los meses de noviembre a abril— y en la que se espera un incremento significativo del número de viajeros.
“Para el primer trimestre del 2023 los pronósticos son muy favorables, por lo que estamos en condiciones de respaldar la aspiración anunciada por el Ministerio del Turismo de recibir durante el próximo año más de 3 millones de turistas extranjeros, el triple de lo recibido en el 2022”, manifestó el funcionario.
De igual modo, manifestó que el sector dispone de toda la logística y los suministros en aras de asegurar las ofertas y servicios diseñados durante los días festivos de fin de año para cumplir las exigencias de los clientes nacionales y del mercado internacional. (Adaptado de Escambray).