Funcionarios del Ministerio de Transporte (Mitrans) sostuvieron un encuentro con la prensa este lunes para analizar la situación de este sector en Cuba. El encuentro forma parte de las actividades por el Día del Trabajador del Transporte, el 28 de junio
Eduardo Rodríguez Dávila, ministro de Transporte, se refirió a las principales problemáticas de este sector y las iniciativas que ha promovido el ministerio para mejorarlo.
Su intervención comenzó con una valoración sobre la transversalidad del transporte en la sociedad cubana.
El ministro explicó que el fenómeno que experimenta el transporte en el país es la “disminución de las capacidades de transportación de pasajeros y de carga” por varios factores objetivos y subjetivos.
Uno de ellos es la insuficiente disponibilidad de recursos financieros.
Rodríguez Dávila recordó que el sector necesita el ingreso de moneda libremente convertible para garantizar combustible, piezas de repuesto y otros elementos logísticos.
La disminución de esos ingresos por los efectos del bloqueo, la COVID y una crisis económica mundial ha traído como consecuencia que el sector no pudiera disponer del nivel de financiamiento necesario.
“Las bases principales de transporte de todo el país han estado trabajando prácticamente sin piezas de repuesto los últimos tres años”, comentó el ministro.
Explicó que el efecto de esas carencias ha repercutido en la disponibilidad técnica, “que ha estado por debajo del 50%”.
Otra problemática que refirió fue la disponibilidad del combustible.
Rodríguez Dávila también abordó la situación económica en moneda nacional de las empresas operadoras. El transporte estatal, dijo el ministro, presta servicios con niveles de precios que, aunque son aceptables para población, están por debajo del umbral de la rentabilidad de las empresas, muchas de las cuales reportan pérdidas.
“El tema de la vialidad es un factor que incide de manera negativa en el transporte público, en el caso del automotor y del ferroviario también”, dijo.
Agregó que “es un elemento sobre el cual trabajamos permanentemente”.
Sobre las causas de los problemas del transporte, dijo que “hay cuestiones organizativas, de administración, pero hay cuestiones objetivas que están presentes y no podemos obviar”.
El ministro explicó los efectos del bloqueo en este sector, que ejemplificó con la reducción drástica de ingresos en moneda libremente convertible a partir de la prohibición de viajes de cruceros a Cuba.
También mencionó la persecución a los buques que transportan combustible (y los sobrecostos que ha significado la medida para el país) y las dificultades para arrendar o comprar aviones. (Tomado de Cubadebate).