Además de la reparación de las viviendas afectadas por el tornado que golpeó al asentamiento trinitario, se ejecutarán otras acciones dirigidas a preservar el patrimonio edificado de ese poblado, exponente de la arquitectura vernácula en el país
Por: Ana Martha Panadés
Asentada en el Valle de los Ingenios, la comunidad de San Pedro no vive al margen de las dificultades que frenan cualquier empeño en Trinidad y también en Cuba. Sin embargo, los recursos para reparar las viviendas con daños parciales o totales a causa del tornado ocurrido en el mes de abril último se han priorizado allí, así como el seguimiento a las labores de recuperación.
Rafael Rosa Acosta, director de la Vivienda en este municipio, precisó a Escambray que, de las 13 afectaciones reportadas, solo resta por concluir la reconstrucción total de la cubierta de dos de los inmuebles.
“Uno de los damnificados ya tiene en su poder las planchas de fibrocemento, los ladrillos que logró salvar de los escombros y un nivel de cemento. Con los canelones que se recuperaron de esa vivienda se le dará solución a la otra afectación. A ambos propietarios se les facilitarán otros materiales para que puedan acometer los trabajos por esfuerzo propio.
Asimismo, en la escuela primaria Esteban Hernández ubicada en el asentamiento y que sufrió los embates de este evento meteorológico, ya se reconstruyó la cocina, además del primer bloque con la mejora de la cubierta y la colocación de puertas y ventanas de aluminio, gracias a las labores ejecutadas por una brigada de Trabajadores por Cuenta Propia contratada por la Oficina del Conservador de Trinidad y el Valle de los Ingenios.
De acuerdo con Oslei González Iznaga, director de la Unidad de Apoyo a la Dirección Municipal de Educación, se formalizó un nuevo contrato con esta fuerza para proseguir la reparación en el resto de los locales afectados, entre ellos el comedor, hasta concluir la rehabilitación total del centro educacional.
Rosa Acosta agregó que el Grupo de Trabajo Municipal evalúa otras alternativas como parte del seguimiento a San Pedro, con el fin de agilizar el proceso de legalización de un número significativo de viviendas para que sus propietarios puedan adquirir los recursos y mejorar la vulnerabilidad de las cubiertas, fundamentalmente. “De los 1 646 inmuebles censados, entre ellos 200 apartamentos, 701 se clasifican en buen estado, 203 como regular y 242 de mal”, puntualizó.
El funcionario se refirió, además, al inicio inminente de la rehabilitación de los dos edificios que conforman la comunidad de Alberto Delgado, perteneciente a este asentamiento, prevista en el plan de la economía desde hace dos años y aplazada hasta hoy por no contar con respaldo de materiales.
A nivel de país —acotó Rosa Acosta— se le dio prioridad a este poblado en cuanto a financiamiento y recursos, en particular la manta empleada en la impermeabilización. En la etapa de demolición participarán los propios vecinos, mientras las labores técnicas serán ejecutadas por fuerzas del Ministerio de la Construcción de la provincia y del sureño territorio. (Tomado de Escambray).