Por: Mariolys González Calderón
Con una mirada conservacionista, la Comunidad 23 del Consejo Popular Pitajones, perteneciente al Plan Turquino Trinitario, se prepara para realizar el Festival de la Cotorra y el Catey en su Novena Edición, los días 4 y 5 de junio próximos.
En declaraciones para Radio Trinidad Digital, Alieski Gil Carballo, Educador Popular y Ambientalista subrayó que el Festival se realiza el primer fin de semana de junio, ya que en esos días se hace la limpia del Escambray y se inaugura la Comunidad.
En esta ocasión tendrá un significado aún mayor, pues este año coincide con el Día Mundial del Medio Ambiente, afirmó.
Gil Carballo indicó que la primera jornada estará dedicada a la actividad metodológica, se proyectarán documentales y estudios que se han hecho sobre la reproducción de esas especies, y se efectuarán concursos en todas las manualidades. Es un día festivo donde los gestores del proyecto trabajarán con niños, adolescentes y círculos de abuelos.
El también Coordinador del Proyecto señaló que el segundo día se unirán todas las tradiciones culturales y se pondrán en función de la conservación de la Cotorra y el Catey. Cada actividad que se haga ya sea monta de toros, torneos o carreras de caballos, deben estar relacionado con el Festival.
Destacó el apoyo incondicional de la Dirección Municipal de Cultura y Arte, de la UNEAC de Sancti Spiritus, Flor y Fauna de la Reserva Ecológica Lomas de Banao, así como del Centro Memorial «Martin Luther King, del Instituto Provincial de Ecología y Sistemática, y la Sociedad de Zoología.
El Festival de la Cotorra y el Catey, que se celebra hace nueve años, surgió durante un encuentro del grupo gestor del proyecto con especialistas del Centro de Intercambio y Referencia sobre Iniciativas Comunitarias (Cieri), en la Reserva Ecológica Lomas de Banao, cuando realizaban una sistematización del trabajo comunitario en la Comunidad 23.
A partir de ese momento Maikel Cañizares, biólogo y especialista en cotorras y cateyes, propuso la creación del festival. En ese entonces, se debatía el resultado de un diagnóstico participativo ambiental, que afirmó que esas especies están altamente depredadas, y se comercializan con la venta y captura de pichones.
Según sus organizadores, este certamen es un esfuerzo ecológico que reúne a especialistas para intercambiar nuevas estrategias y elevar la calidad de vida de esta ave.
Con una mirada conservacionista, se unieron las ideas para lograr un proyecto ambientalista como el Festival de la Cotorra y el Catey, que es para la mayoría de los montañeses el “Carnaval del Escambray”.