Sábados para niños en Trinidad de Cuba

A partir de ahora, cada mes, los niños tendrán actividades culturales y recreativas en el Patio Béquer del Centro Histórico de Trinidad. Foto: José Rafael Gómez Reguera.

Por Karen Reyes Aróstica

Una alegría recibieron los niños de Trinidad, al conocer que a partir de ahora cada mes tendrán una actividad con payasos, proyectos artísticos y magia en el Patio Béquer del Centro Histórico de la Tercera Villa de Cuba, declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1988.

La idea, surgida en conversaciones entre la empresa Aldaba, el Centro de Promoción de la Oficina del Conservador de la ciudad de Trinidad y su Valle de los ingenios y la Casa de Cultura Julio Cueva Díaz  de esta otrora villa, soluciona una de las carencias más longevas aquí: que los niños tengan un espacio y una oferta cultural sistemática para su disfrute y esparcimiento de forma sana.

Este sábado, el primero de muchos que vendrán, participaron los proyectos Musicarte y Vir-ritmo; los niños de los talleres de creación de artes plásticas que coordina Casa de Cultura y el aula de magia del grupo Estilo Propio, una compañía que tiene contrato con Aldaba y que desde hace varios años ha ido ganando espacios en las comunidades rurales y urbanas con el trabajo infantil.

Mientras en los intermedios de cada una de las presentaciones, las promotoras del Patrimonio Cultural de la Oficina hicieron preguntas sobre el patrimonio trinitario y estimularon en los niños la preocupación por el cuidado de los inmuebles y la ciudad en general, pues solo las nuevas generaciones y su compromiso salvarán la herencia de ya 505 años.

Allí, una emoción se adueñó de todos más allá de las críticas: al fin los niños tienen una actividad con la que pueden contar para su divertimento y recreación donde, por suerte, también aprenden sobre la ciudad y estimulan sus habilidades creativas.