Muestra de que sus ideas en la lucha por la libertad acompañan a los agradecidos, sesenta y dos años después de su desaparición física, los cinco mártires trinitarios del Movimiento Revolucionario 26 de Julio perviven en el corazón del pueblo.
Así se patentizó en el homenaje ante el monumento erigido a su memoria en Trinidad, donde se les homenajeó al realizar el pase de lista de los presentes sobre su presencia entre nosotros, incluidos los ocho estudiantes de medicina cruelmente fusilados por el Gobierno colonialista español, a quienes en este 27 de noviembre también los cubanos rindieron tributo eterno.
Ofrendas florales, poesías y canciones de contenido social y patriótico se dedicaron a los mártires de ambos sucesos mientras el joven Miguel Alberto Amaró en nombre de los estudiantes de las diversas carreras de Medicina, significó el encargo de continuidad con el proyecto instaurado por el Ejército Rebelde con Fidel Castro, Raúl Castro, Juan Almeida Bosque, Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara.
Manuel Arboláez Santana, presidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en el municipio, al reseñar lo sucedido en la Villa San Cristóbal de La Habana y en esta ciudad, respectivamente en distintos momentos de nuestra historia, acentuó el empeño de ser fieles a las doctrinas de los caídos y al Comandante en Jefe en el aniversario sesenta y uno de la victoria de la Revolución cubana.