Texto y fotos: Belkis Niebla López
Cortarles el paso a coleros, revendedores y acaparadores califica como prioridad para la Dirección del país que hace un esfuerzo extraordinario para ante la actual situación generada por el nuevo coronavirus, lograr que el pueblo reciba lo necesario para subsistir ante la escasez.
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Es por ello que tal y como anunciara en reciente Mesa Redonda, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, el Gobierno diseñó un plan que persigue poner contra la pared las ilegalidades y delitos asociados a estos ciudadanos, quienes intentan vivir e, incluso, hacer fortuna, a costillas de las carencias de los demás.
Así en el municipio de Trinidad, provincia de Sancti Spíritus como en todo el país, se crearon un total de 22 grupos encargados de llevar a cabo la tarea, pero no podemos decir que se comporte tal y como estaba previsto, aún hay dificultades que pulir como el hecho de que no se logra del todo la organización y venta equitativa. Hemos podido apreciar que hay personas que compran un mismo artículo en el día en distintos lugares, salen de una tienda y van para la otra y eso sucede porque no se está llevando un control como se ha hecho en otros lugares de la isla.
Corresponde entonces revisar las acciones encaminadas a este enfrentamiento de forma tal que las dificultades tengan solución porque si no estamos dando vueltas alrededor del mismo problema; en nuestro municipio hay que buscar la alternativa para que no haya repetición de las mismas personas en diferentes tiendas tal y como se ha hecho en otras provincias y municipios y más cerca en el Consejo Popular Casilda, porque el plan previsto para hacer frente a la problemática tiene como objetivo que el pueblo, reciba los productos de forma equitativa.
No podemos olvidar que, los coleros, esos que hasta ahora podían monopolizar las listas de turnos de compra en los establecimientos comerciales, apenas constituyen la punta más visible de una cadena delictiva que incluye a revendedores y acaparadores, quienes personalmente o a través de terceros comercializan productos de aseo, alimentos y otros de primera necesidad a precios abusivos en el mercado informal.
Por esa razón el Gobierno cubano le ha entrado con la manga al codo a este fenómeno a pedido del propio pueblo y, en consecuencia, aprobó un plan de acciones, en el que todos debemos aportar para que esas personas que se aprovechan de tales situaciones no tengan oportunidad de ¨hacer de las suyas¨, es por eso que insisto en que hay que revisar en cada jornada de venta donde estuvieron las brechas y en función de ello trazar estrategias que contribuyan a favor de perfeccionar el accionar de enfrentamiento.
Para el pueblo resulta vital el éxito del plan de acción contra coleros, acaparadores y revendedores, porque de ahí depende que en los hogares en medio de la situación epidemiológica que existe en el mundo, tengan lo necesario para subsistir.
Sé que en Trinidad el enfrentamiento a coleros, revendedores y acaparadores tiene desde ya la respuesta que llevan, solo que hay que analizar casuísticamente cada problemática y a partir de ello, perfeccionar el plan de acción a favor de mejores resultados que redundan al final beneficio para el pueblo.
Porque en momentos como los que vivimos no podemos olvidar la frase pronunciada por nuestro eterno líder Fidel Castro Ruz en el discurso en las honras fúnebres de las víctimas del bombardeo a distintos puntos de la república, efectuado en 23 y 12, frente al cementerio de Colón, el día 16 de abril de 1961 cuando afirmó: “…esta es la Revolución socialista y democrática de los humildes, con los humildes y para los humildes…”