Reinel Arboláez Valle, ejemplo de amor y dedicación al trabajo

Por: Belkis Niebla López

A Reinel Arboláez Valle desde pequeño le apasionó ser chofer, propósito que hizo realidad y en el que estuvo 23 años de su vida laboral en el Central FNTA de Trinidad, hasta que fue desactivado y a partir de ahí ya no estaría conduciendo, pero su espíritu de trabajo y ganas de hacer lo llevaron entonces hasta la Unidad Presupuestada de los Servicios Comunales en el municipio.

En esta ocasión, Reinel se desempeñó en la limpieza de las áreas verdes, actividad a la que dedicó el mismo amor y empeño que a su labor anterior. Así estuvo 7 años en los que, temprano en la mañana, con sus herramientas, en las áreas verdes ejecutaba acciones de chapea y poda, algo que según afirma le hacía sentir muy bien por estar aportando a la comunidad, porque le gustaba que la gente al pasar viera las áreas limpias.

Después Reinel Arboláez Valle pasó a trabajar al Centro de Elaboración de la gastronomía donde se desempeña todavía como elaborador; sin embargo por la dedicación, sentido de pertenencia y deseos de contribuir y hacer que tiene este trabajador trinitario, lo mismo realiza la elaboración, que lo vemos ayudando a descargar los abastecimientos que llegan, o limpiando los alrededores del Centro, recordando su oficio anterior y hasta apoyando en la limpieza del local, tarea tan importante en tiempos de pandemia.

La experiencia, responsabilidad y disciplina de Reinel le hacen merecedor del reconocimiento del colectivo de trabajadores del Centro de Elaboración en Trinidad. Hombres como él se encuentran en el día a día en diferentes centros, son los agradecidos, esos para los que no hay imposibles, los que son capaces de cambiar su sueño cuando es necesario y asumen nuevos retos con el mismo amor y dedicación.